Villes

Hondarribia (version de 2003)

Otra vez puerto navarro, 1805-1814. El 16 de setiembre del año 1805, la Diputación navarra solicitaba del rey la anexión a Navarra de Irún y Fuenterrabía, significando la gran importancia que tenía para Navarra la posesión de un puerto de mar. El rey accedió por real orden de 26 de setiembre del mismo año. El 10 de octubre el comisionado de Navarra, Miguel Escudero, tomó posesión de Hondarribia. La Diputación guipuzcoana elevó diversas representaciones al monarca, protestando contra la anexión, pero no fueron escuchadas por el rey, que ratificó la orden de 26 de setiembre (doc. en CCPV, t. III, fol. 494). Sin embargo, Guipúzcoa siguió intentando recuperar los territorios perdidos y por fin el 18 de agosto del año 1814, el virrey de Navarra, Conde de Ezpeleta, comunicaba a la Diputación navarra la decisión real de devolver los territorios a Guipúzcoa, hecho que tuvo lugar poco después.

En poder francés, 1808-1813. La plaza fue ocupada en nombre de José I en 1808. El 11 de marzo del año 1813, el sargento 1.° D. Fermín Leguía, acompañado de quince guerrilleros, tomó el castillo de Fuenterrabía, sorprendiendo a su guarnición francesa por la noche. Se llevó el armamento y municiones que pudo, inutilizando el resto, y dio fuego al baluarte, que quedó destruido en sus tres cuartas partes. Tras la batalla de San Marcial los franceses abandonaban la plaza.

Guerras carlistas. Los carlistas ocuparon sin problemas la ciudad pudiendo huir los elementos caracterizados del liberalismo a San Sebastián, Hendaya u otros lugares seguros, entre ellos el alcalde J. M. Benigno Iriarte. Tras la venida de la British Legion la situación rebelde se hizo más difícil en la zona. El 18 de mayo de 1837 capitula la guarnición carlista de Fuenterrabía ante los ataques de Schelly, ataques combinados con los de la línea de Hernani preparados por Espartero, mientras el grueso del ejército carlista estaba en la expedición real. Durante la segunda guerra no fue objeto de especial interés carlista cuyas tropas asediaron Irún y dominaron Jaizkibel. Al acabar ésta y abolirse el sistema foral, su importancia comercial decrece.