Sailkatu gabe

EUSKARA OBJETIVO (LENGUA: HIZKERA)

SINTAXIS III.

Concordancia. Tiene sus peculiaridades, algunas muy interesantes, como el acuerdo entre el género de la persona alocutiva, aquella a quien se habla, y el verbo con expresión de género. Otras veces se refiere a ciertas determinaciones de diversos epítetos de un nombre con un solo determinante de número y función:

arriA gogorrA DA, "la piedra ES negra"; arriAK gogorrAK DIRA, "LAS piedraS SON negraS"; I, KEPA nere aitá etorri duK, "Tú, KEPA, mi padre ha venido". I, MIREN, nere aita etorri duN, "Tú, MARIA, mi padre HA venido".

La concordancia, inherente y conformativa, se refiere a los miembros de frase, a la proposición completa y a una proposición y la subordinada correspondiente.

Los miembros en sí. Cuando varios adjetivos califican a un mismo nombre, solamente el último de ellos se suele determinar y declinar. Hay concordancia de número y caso, pero no de género, inexistente para cada uno de los componentes.

gizon gaxo, jakintsu, zuzen bat, "un pobre hombre, sabio y justo"; o bien, gizon-gaxo jakintsu-eta-zuzen-bat.

Da lo mismo. La determinación sólo afecta al último adjetivo. En atención al significado concuerdan entre si todos ellos pero recayendo la mayor importancia en el último, aunque también los consiguientes adjetivos pueden ser sucesivamente complementarios de los que preceden. El caso se expresa declinando el determinante:

gizon gaxo jakintsu zuzen bat, "A un pobre hombre sabio y justo".
El número singular puede combinarse con el plural: etxe, itxaso eta txalupAK, "LAS casa, mar y barcaS", o bien, etxeA, itxasoA eta txalupAK, "LA casa, EL mar y LAS barcas"; etxe ta itxasoA, "EL mar y casa" (casa y mar); etxeA eta itxasoA, "LA casa y EL mar".
En esta última frase el castellano concuerda en género y en número, entretanto el euskara lo hace solamente en número, determinando a cada componente por separado o de una sola vez a ambos: (etxe eta itxaso)A. Cuando se trata, no de epítetos para un solo nombre, sino de unión de nombres entre sí, la pluralidad de los mismos se refleja en el artículo -ak: zeru-lurrAK, "cielos y tierra"; zortzi t'erdiAK, "LAS ocho y media": (zortzi t'erdi)AK. La frase explicativa, intercalada como un inciso en una proposición, se emplea en forma definida, indefinida, partitiva:
bero ta beltzA, zein goxoa dan kafia, "caliente y negro, cuán estupendo es el cate"; bero eta beltz, zein goxoa dan kafia.
En este segundo caso en forma indeterminada y en indefinida como en beste gauzatara gogoa aman gabeRIK, joan zan, "sin distraer la atención a ninguna otra cosa, se fue". Algo parecido ocurre con las exclamaciones e interjecciones intercaladas: nik!, gaxua! (zer egingo nuke?), "¡yo, pobre de mí! (¿qué haría?)"; guk!, gaxuak! (zer egingo genuke?), "nosotros, ¡pobres! (¿qué haríamos?)". La concordancia entre guk y gaxuak, no es formal, sino inherente a la pluralidad de ambos, guk, "nosotros" y gaxuAK, y del mismo modo con un pronombre cualquiera: au, gaxuA!, "¡éste, pobre!"; abek, gaxuAK!, "¡éstoS, pobreS! En castellano concuerdan formalmente "estoS" y "pobreS" por medio de ambas S. En euskara concuerda la pluralidad semántica de gu con la formal y semántica de gaxoAK.

La oración en si misma. Ya no basta que consuenen los distintos componentes de un miembro oracional entre sí, sino que concuerden también los miembros entre sí como componentes de la frase completa; y ahora se complica la cosa porque han de concordar el sujeto, el complemento y el verbo en persona, género, número y caso, según las exigencias de la preceptiva euskérica. Si se quebrantan las reglas de la concordancia se produce, indudablemente, o frase sin sentido, de sentido equívoco o de sentido discordante. No se puede decir ni onak da, "yo buenos es", porque no tiene sentido el que yo sea en plural siendo singular, ni que el verbo se exprese en tercera persona siendo yo de la primera. Del mismo modo no se puede decir orreruntz doa "se va hacia aquí" porque uno y otro son incompatibles. En este caso no concuerdan en sentido.

Atributiva.-El atributo puede presentarse con verbos transitivos y con intransitivos. En el primer caso concuerda en número con la persona a la que califica con los verbos izan, "ser"; egon, "estar"; iduri, "parecer" y ésta, con la persona verbal. En el segundo caso, cuando izan funciona con las flexiones transitivas, interviene la pluralización verbal:

semeAK, andiAK, diTu, "tiene loS hijoS grandeS"; gizonA, onA DA, "El hombre ES bueno"; gizonAK onAK DIRA, "LOS hombreS son buenoS".

A estos ejemplos con atributo definido se pueden añadir otros en indefinido y en variadas modalidades: alai eta zoriontsu bizi zan, "vivía alegre y feliz"; ardi txikia, beti bildotx, "oveja pequeña, siempre cordera"; neska goseti, dantzari, "muchacha hambrienta, bailarina". En este segundo ejemplo esa indefinición la produce la elisión verbal. También se emplean los atributos en indefinido cuando se enumeran uno tras otro: eder, aundi eta garezti, "hermoso, grande y caro"; y lo mismo, cuando se quiera dar al atributo un sentido general o neutro, como en txar da ezjakitzea, "es malo el no saber". Otras veces, cuando se trata de atributos que expresan sentimiento, sensación, pensamiento, acción, permiso, aptitud, conveniencia, estado, etc., quedan también o pueden quedar en indefinido: gose naiz, "tengo hambre" (lit. soy hambre); baldin gai bada etxe ura, "si aquella casa es digna" (gai); izerdi naiz, "estoy sudando" (lit. soy sudor); ikuskizun dira, "son visibles".

Objetiva: Concuerdan el sujeto, el complemento directo y el verbo, que debe ir conjugado con auxiliar transitivo. En euskara la propia flexión verbal lleva en sí la forma y la idea del objeto sobre el cual recae la acción verbal. En ikusi du, que en castellano se traduce por "ha visto", en euskara, en realidad, encierra el castellano "lo ha visto", La d- de du, se refiere a ese "lo" objetivo. Por el motivo expuesto la flexión verbal debe concordar con el número del complemento directo y la persona del sujeto:

En Iñaki-k etxe bat ikusi du, "Iñaki ha visto una casa", concuerdan la tercera persona Iñaki con la tercera persona du, y el singular etxe bat, con du. En Iñakik etxe batzuek ikusi ditu, "Iñaki ha visto varias casas", ocurre algo sorprendente: al plural batzuek, "varios", se corresponde diTu en el verbo "LAS ha". El plural del complemento directo concuerda con el plural objetivo de la flexión verbal -it-. Si los sujetos son varios y el complemento está formado también por varias cosas, estas modificaciones repercuten inmediatamente en el auxiliar verbal: >(ni, zu eta are)k (etxe, itxaso eta txalupa)a ikusi ditugu, "(yo, tú y él) la casa, el mar y la chalupa hemos visto".
En castellano concuerdan el significado plural del sujeto de primera persona plural del verbo con el sujeto primera persona plural del verbo. En euskara, además de esos acordes, concuerdan también el plural semántico del complemento con el plural formal del auxiliar diTugu. Si decimos txerri talde bat ikusi dut, "he visto una piara de cerdos", concuerda el singular de objeto talde bat con el singular objetivo de la flexión dut, aunque semánticamente los cerdos de la piara sean muchos. Cuando el objeto está representado por personas es lo mismo que si se tratara de cosas. En ambos casos se trata siempre de un caso acusativo: zu ta ni maite gaitu aitak, "el padre nos ama a mí y a ti" (lit. tú y yo nos ama el padre). Con el complemento objetivo indirecto ocurre lo mismo, que concuerda el complemento y el sujeto con el auxiliar verbal: transitivo, dotado de pluralizador de objeto y de persona y en el grado personal requerido: galletAK bialtzen diZKizu, "te envía galletas". El pluralizador dativo es en este caso -izki-; egi BATZUEK esan diZKIOt beraRi, "LE he dicho a él varias verdadeS". La concordancia se extiende, pues, el caso dativo de -ri (berari), al pluralizador objetivo (batzuek, -zki) y a la tercera persona bera (él) y -o- "le" (de diOt = se lo he).

Circunstancial.-La concordancia de sentido se refiere al tiempo, al lugar y al modo, pero, más mirando al sentido que a la forma. Se trata de incompatibilidades de sentido. Deben usarse en tiempo, lugar y modos compatibles el complemento circunstancial y el verbo. Parece que predomina o domina la indiferencia formal: GOGOTIK jan dut, "lo he comido con gana"; GOGOTIK jan ditugu; GOGOTIK etorri dira, "han venido voluntariamente"; GOGOTIK etorriko da, "vendrá voluntariosamente". GAUR etorri da, "hoy ha venido"; GAUR etorri gera, "hemos venido hoy", pero no GAUR etorri zan, "hoy vino", sino GAUR etorri da, "HOY HA venido"; ATZO etorri zan, "ayer vino"; pero no, ATZO etorriko da, "AYER vendrá". El acorde de número, tiempo, modo, etc. lo establece el sentido de la frase principal y el que sea "adecuado" a la secundaria para expresar la idea que el sujeto desea.

Oración y oración. El tiempo y el modo de la oración subordinada deben concordar con el tiempo y el modo que reclama la oración principal para que el sentido sea el debido:

Tiempo: Quiere decir que el tiempo de la proposición subordinada se halla en relación al que se ha empleado en la principal, pero subordinado aquél a éste: ikusi DUT or ZAUDELA, "HE visto que ESTAS ahí"; ikusi GENDUEN etorri zala, "VIMOS que HABÍA venido". Pero la acción subordinada puede ser más antigua y en ese caso se expresa una en imperfecto y la otra en pluscuamperfecto: esan ZIDAN bi bertso kantatu zituela, "me dijo que HABÍA CANTADO dos versos". También la subordinación puede establecerse entre una acción que era futura en relación a la acción de la oración principal: pentsatu NUEN joanGO zala, "pensaba que se iría" Sea presente o pasado el tiempo de la oración principal, el tiempo de la subordinada deberá concordar con el sentido que el sujeto quiera dar a la idea: esan dit Lesaka-n dala, zala, izango dala, "me ha dicho que está en Lesaka, que estaba, que estará".

Objeto y modo.-En la proposición erosi dizkizudan liburuak, pagatuko dizkidazu, "los libros que te he comprado, me los pagarás", el tiempo futuro de la subordinada concuerda con el presente de la principal por razones semánticas, de significado, ya que para poder pagar hay que contraer la deuda con anterioridad. Concuerdan, además, en la pluralidad del objeto y en el modo indicativo.