Sailkatu gabe

EUSKARA OBJETIVO (HABLA: HIZKETA)

Cambios léxicos. Ya no se trata de oscilaciones entre un sonido más breve o más largo, más abierto o más cerrado, más simple o más compuesto. Tampoco de contaminaciones, de nasalidad, aspiración o palatalización. Ahora se trata, lisa y llanamente, de cambios fonéticos en el seno de la palabra. En los vocablos au y kau, hay un sonido de diferencia. En las sucesiones Molinibar y Bolibar desaparecen dos fonemas y se permuta M por B. Y en las variantes dialectales dei y die las dos vocales han dado un viraje cambiando de puesto. Estos casos nos autorizan a distinguir:
- Cambios cuantitativos por aumento, pérdida o ambos combinados.
- Cambios permutativos por sustitución de un fonema por otro.
- Cambios de posición por ocupación de un lugar distinto en la cadena fónica. (véase tabla)
Estos ejemplos nos ponen en la pista de todo un juego cambístico. Lo que interesa en esta sección es la averiguación de qué tipos de cambios se producen dejando su casuística para cuando se hable de los usos fonéticos del habla vasca.
Cuantitativos.-Los textos históricos nos dan esta serie aditiva o sustractiva, según se considere:
Artzeiz > Hartzeiz > Gartzeiz = (Garcés)
Las variantes dialectales, esta otra:
au, (G.), hau (L.), gau (BN), kau (R)
Por otra parte, el cambio tantas veces citado y documentado desde la alta Edad Media, Molinibar / Bolibar, nos ofrece pérdida de -ni- interno. Los dialectos nos ofrecen numerosas series:
iturrilla = turrilla; iñauteri = ñaute.
dadukat, daukat, dakat; dikat, diat.
bada = ba, Petroetxe - Petrotx.
A estos fenómenos de adición o de pérdida sin finalidad aparente se suman otros que cumplen ya una función concreta de deshacer un sonsonete de idioma extraño o de ligar piezas fónicas que se agrupan:
cristiano / gIristino / sagarTegi, ederTasun / suKalde; gUrutze, abadE.
No nos importa averiguar si -t- y -k- son residuos de un originario eta y -kin. Esta es labor de etimología y, por consiguiente, para tratar en otro lugar.

Permutativos.-Cuando vemos que una vocal, por ejemplo u, se alterna con i, o a con e, da la impresión de un simple deslizamiento de un sonido a otro. eskua y eskia, gara y gare, besoa y besua, etxea y etxia. Es totalmente distinto el caso de permutación de consonantes. Hay ahora una total substitución de un sonido por otro paralelo, pero separado. Ya sabemos que, en principio, b. d. g. se convierte en p. t. k., y que l puede convertirse en r; b, en m, y d, en r:

tienda ezdaki ezgera ezbalitz edan naranja gar/i
denda eztaki ezkera ezpalitz eran aranja gal/-
Y la permutación de dobles por uno o viceversa:
daut otz-tu honrraoa uts-tu
dot oz-tu ondraua us-tu
au>o tz>z rr>dr ts>s
Pero estas permutaciones se realizan solamente en ciertas circunstancias y condiciones textuales. La disimilación se produce en uturri e iturri, unguru e inguru, gitxi y gutxi, laba y labe, guzu y guzi y la asimilación en el cambio si sucediera a la inversa.

Transpositivos.-También el orden de los sonidos articulados en la cadena oral puede ser alterado. Es el reino de la metátesis. Es sumamente sencillo el cuadro de transposiciones:

- Un fonema se traslada de lugar: eUskara y eskUara.
- Dos contiguos viran de lado: dei y die, zei, zie.
- Dos separados por otro se hacen contiguos:
Atano y Ataun, Solano y Solaun.
a/o > au a/o > au
De separados que estaban pasan a ser contiguos. La primera forma es sin duda ao que se desliza a au y todavía a ai como en: Larrano>Larraun>Larrain>
- Dos sonidos separados se ceden el puesto sin ser nunca contiguos:
gare y gera, malba y balma, llano y laño
a/e y e/a, m/b y b/m, -/ y /-
En el último ejemplo es i oculto en ll y ñ el que cambia de lugar.