Sailkatu gabe

EUSKARA OBJETIVO (HABLA: HIZKETA)

Cambios elementales.
Vacilación.-Enumerar el alfabeto no es otra cosa que enumerar las especies fónicas de la lengua. Decimos a, e, i, o, u, p, t,. Pero la experiencia hablada nos dice otra cosa. Hay muchos tipos de a, de e, de p. Tienen un largo o duración, cierta consistencia o cierta vertiente sin perderse la identidad específica. Así como hay una gama de amarillos, hay también una gama de fonemas e. En euskara no se aprecian tanto estas variantes u oscilaciones como en el francés, por ejemplo, con sus e abiertas, cerradas, semimudas y mudas. Sin embargo, el euskara conoce vocales largas y breves, densas y menos densas. Otras veces, al comparar el euskara y el francés, nos parecen los sonidos vascos más centrados, menos vertidos hacia matices que les aproximan a otros de articulación vecina. Estas leves diferenciaciones tienen, a veces, en francés valor significativo y es esencial Cuando esto no ocurre pasan desapercibidas. El euskara no ha hecho uso de esos matices oscilantes para su semántica.
Variante.-Otra especie de oscilaciones en el habla. Unas rebajan, quizá por la ley del mínimo esfuerzo, la consistencia del sonido buscando el más fácil de pronunciar. Hay equivalencias en ese sentido. No es raro ni mucho menos oír, eran, por edan, iruri por irudi, neria ra por neria da, se trata de ablandamiento y degeneración idiomática. Otra especie se produce por proliferación de un sonido sin que los dialectos se hayan unificado:

yakinyaungAradudiguzki
jakinjaungEradutiruzki
xakinxaungIraduriduzki

Y, finalmente, por confusión de sonidos se convierten dos en uno, como es hoy muy corriente entre guipuzcoanos y vizcaínos, al decir: Sure por Zure, MaTZa por maTSa, etxe (de uso general) por etse, ondarza por ondartza, Aranzazu por Arantzatzu, Isaba por Izaba. Se observan asimismo variantes notables en el articulo común -a que se une fonéticamente, según los casos, y dialectos de una forma u otra:
gona- = gona, gone-a, goni-a, gone-e, goni-e, goni-i; erle + a = erle-a, erli-a, erle-e, erü-e, erll-i; ogi + a = ogi-a, ogi-e, ogi-i; bero + a = bero-a, beru-a, beru-e, beru-u; gau + a, gau-a, gab-a, gabi-a.
Contaminación.-Sin que nos propongamos averiguar las causas, consignemos que las vocales vascas se contaminan de nasalidad solamente en las vecindades del francés, en los dialectos nórdicos, y alguna que otra palabra del ronkalés y salazenko:
azkoi, atze, ktu, eskalanpü,
"tejón", "olvidar", "olor", "zueco".
No tiene la nasalización importancia en euskara, a pesar de su semivecindad francesa y más directamente gascona. La razón de la nasalización francesa la encontraba irónicamente un español diciendo que los galos fueron una raza acatarrada. Cosa parecida ocurre con la aspiración, casi reducida a la misma zona que las nasalizaciones. Es una característica vasca el desconocimiento total de la b aspirada o sea v. La f existe pero no es corriente: parra, barra, farra; alperra y alferra; apari y afari. En cambio j, existe viva en voces tan vitales como jaun, jauregi, derivadas de yaun, yauregi. Aparece aquí y en castellano simultáneamente en tiempos muy modernos. La h, o aspiración pura, es de uso intenso en los dialectos nórdicos vascos. Parece un fenómeno temático pues ese uso está relacionado con el largo de la palabra, la entonación y la posición del acento y faltando siempre después de s, z.
aphez, akher, / gin-h-arreba, onhetsi, / bethe, arthe
Estos ejemplos la ostentan en principio, medio y final de palabra. Más importante es la palatalización en el euskara. En vizcaíno amenaza echar a perder el habla entera. Se le emplea también para fines gramaticales, principalmente diminutivos. Se produce por influencia de i sobre las consonantes I, n, t, d, s, z haciendo, ll, ñ, tt, dd, x, x oilo = ollo, aita = aita, inaute = ñaute, isilik = ixilik diatork = ddatork. No siempre se trata de influencia de i, ni procedencia rigurosa de la serie de equivalentes antes enumerados. El diminutivo o el habla para los niños ofrece otras series: eder = edder, zakur = txakur, zerri = txérri, txori = xori, jan= ñan, nabar = ñabar. Los sonidos compuestos también entran en este juego palatalizador: estén en principio, medio o final de palabra.
ts > tx diz > dx > j > x
etse > etxe dizat > dsat > jat > xat
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