Privilegios. Otros privilegios más fueron otorgados por los monarcas castellanos. Así, el librado por Fernando IV en Valladolid el 13 de marzo de 1307, confirmado por Alfonso XI en Carrión el 5 de mayo de 1317, por el que se autoriza también la venta en Tolosa de la sal de las Salinas de Añana. El mismo rey concedió a Tolosa la instalación de los molinos harineros dentro de la villa (Valladolid, l5 de junio de 1322). En 1337 y 1341 se vuelven a confirmar las exenciones de Tolosa, lo que será de nuevo confirmado por Pedro I en 1351 (Valladolid, 2 de octubre).