Léxico

LIBRO

Los primeros libros vascos. El mundo del libro en el País Vasco siguió una trayectoria similar a la de su homónimo en la península. La poesía oral vasca de la Edad Media desapareció con el régimen de los linajes, o de los «parientes mayores» (Ahaide Nagusiak). Y no ha sobrevivido apenas nada de la literatura de aquella época, si exceptuamos algunos fragmentos de poemas, en su mayoría épicos, que hacen alusión a las guerras de banderizos y un texto excepcional de la literatura medieval vasca Bereterretxen Khantoria (El cantar de Bereterreche). A pesar de la introducción de la imprenta en el País Vasco, fue escasa la edición de libros. Pero según Juan Allende Salazar, de «esta penuria de obras impresas antes del siglo XIX no debe deducirse que fuese escasa la afición a la lectura o el comercio de libros en las provincias vascongadas (sic), puesto que Bilbao era el puerto por donde se introducían en España las ediciones de Amberes, una de cuyas imprentas, la de Plantino, surtía a la sazón de libros de rezo a todas las naciones sujetas a la dominación de los monarcas españoles y, además, de los volúmenes procedentes de las prensas de Pamplona, sabido es lo que en el siglo XVIII influyeron aquí los escritores de los enciclopedistas franceses». La escasez de la edición de libros en el País Vasco fue particularmente grave en lo que se refiere al libro en euskara. Escribe Ibón Sarasola que la publicación del total de libros literarios en euskara, fueran originales o traducciones, fue sólo de tres títulos en el siglo XVI, treinta y seis en el siglo XVII y ciento treinta y siete en el siglo XVIII. Si a este género de obras le añadimos las impresas en el siglo XIX tendremos que desde la aparición de la imprenta hasta el inicio del siglo XX, las obras literarias, originales o traducciones impresas en euskara sólo alcanzó la cifra de 587 títulos, gran parte de ellos de literatura religiosa y escritos por clérigos. La relación completa de los títulos puede encontrarse en el cuerpo B, Literatura, de esta enciclopedia (t. I, p. 565 y ss.; t. II, p. 77, 153, 229 y 373; t. III, p. 55). El primer libro impreso en vasco es un pequeño libro de poemas de Bernard Dechepare, sacerdote y párroco de Saint Michel, que lleva por título Linguae Vasconum Primitiae, y que salió de la imprenta de François Morpain, impresor bordelés, en el año de 1545. Se conserva un único ejemplar de esta obra en la Biblioteca Nacional de París. Algunos años más tarde ( 1571 ), el impresor Pierre Hautin imprimía las traducciones al euskara de dos textos cristianos cuya versión fue realizada por el ministro de la iglesia reformada Joannes de Leizarraga: «Iesus Christ Gure launaren Testamentu Berria» (Nuevo Testamento de Nuestro Señor Jesucristo), «Kalendrera» (Calendario), «Abc edo Christinoen Instruccionea» (Abc o la instrucción de cristianos). Esta importancia del tema religioso y del clero como autor del libro vasco es una constante en los siglos XVI, XVII y XVIII. Durante este período el 90 % de los autores vascos son sacerdotes, elevado porcentaje si lo comparamos con el caso francés en que para análogo estado y género de obras el porcentaje asciende tan sólo al 6 %. Las únicas excepciones importantes a hacer serían Oihenart en el siglo XVII, y Etcheberri y Barrutia en el siglo XVIII.