Non assigné

Gipuzkoa. Historia (version de 1984)

Fundación y fuero de San Sebastián la Nueva.

La vieja población afincada alrededor del Monasterio de San Sebastián "in finibus Ernani, ad litus maris", en tierra de Ernani y a la orilla del mar, es, sin duda, por lo menos un siglo anterior a la nueva San Sebastián fundada por Sancho el Sabio de Pamplona hacia 1180 con concesión de un fuero municipal, el primero de esta naturaleza en Guipúzcoa. En él se da por término a los pobladores de San Sebastián, desde el Bidasoa hasta el Oria, y desde Arrenga hasta San Martín de Arano; es decir, lo que posee el rey dentro de aquel término y todo lo que alli es de realengo, disponiendo además de sus tierras, pastos, selvas y aguas en todos los lugares, tal como lo poseen los hombres que viven en la región. En el fuero se regulan múltiples cuestiones como la liberación de hueste y cabalgada, del impuesto de lezda y otros impuestos, censos, fianzas, fornicación, uso de armas, pesas y medidas, huertos, viñas, árboles cortados, domicilio, alquileres, falsos testimonios, deudas y fianzas, telas, comercio, etc. De la Gascuña, se desplazan por entonces importantes núcleos de población, repoblando ciertas villas y lugares de Euskalerria y principalmente de Guipúzcoa. No se sabe a ciencia cierta la fecha exacta en que comenzaron esas migraciones, pero con toda probabilidad hay que relacionarlas con la fundación de San Sebastián. Los núcleos principales residieron en San Sebastián, Pasajes y Fuenterrabía, como hemos explicitado más adelante.