Venta de la villa de Agoncillo (1056). Según escritura de 1056, el rey de Pamplona vende a Sancho Fortuniones la villa riojana de Villanoba de Sagonciello (Agoncillo). Contiene una adición de donación a San Juan de la Peña, de la misma villa, y del patronato del monasterio de San Salvador de Olazabal (Gip.) por Sancho Fortuniones y su esposa doña Gaila. Se calenda «regnante domino nostro Iesu-Christo, et sub eius imperio Sancius rex in Pampilona».