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Hondarribia

Parroquia principal dedicada a Santa María y dos parroquias de barrio, arciprestazgo de Irun, obispado de San Sebastián.

Ermitas de Santo Crucifixo, Sancti Spiritus, Sta. María de Guadalupe, Nuestra Señora de la Gracia, de Montserrat, Sta. Bárbara, San Bartolomé, San Phelipe y Jacobe, Santa María Magdalena, Santiago y San Telmo.

Convento de capuchinos de San Francisco.

El arciprestazgo de Fuenterrabía, así como los diezmos de Baztán y Bertizarana, pertenecieron, hasta el primer cuarto del siglo XVIII, a la diócesis de Bayona. El 23 de junio de 1714, Felipe V de España confirmó la escritura de permuta de bienes por la que renunciaba Bayona a los ya citados a cambio de los que detentaba Roncesvalles en la Baja Navarra y zona limítrofe. El arciprestazgo que comprendía Oiartzun, Errenteria, Lezo, Pasaia, Irun y Hondarribia, pasó luego al obispado de Pamplona. El patronato de la parroquia correspondió a la misma ciudad, representada por su Ayuntamiento. Se hallaba servida por un vicario, que es cura propio y capellán mayor, y cuatro beneficiados. La presentación de estas piezas, con arreglo a una ordenanza hecha por la ciudad y confirmada por el Consejo Real en 26 de agosto de 1700, debe hacerse por tres vecinos concejantes sacados en suerte de entre otros seis designados en igual forma. La elección debía recaer en sujetos dignos, idóneos y suficientes, hijos patrimoniales de la misma ciudad.

En el arrabal de la Marina otra parroquia titulada de la Magdalena, voló en el año de 1684 con la pólvora que cerca de ella se fabricaba. Se reparó después como ermita. Intramuros existió también, hasta 1719, un templo dedicado a San Miguel. Derruido por estas fechas, parte de sus ruinas se utilizó como almacén de pólvora hasta su destrucción total en 1794 por los convencionales que también deshicieron la capilla real de la puerta de Santa María.

El convento de Capuchinas, sito en el camino de Irún y a proporcionada distancia para prestar servicios a las dos poblaciones, fue fundado por la ciudad en 1664 por voto que hizo en los apuros del sitio de 1638. Solía haber de 12 a 14 sacerdotes, 3 ó 4 legos y otros tantos donados. Después de la extinción de los regulares, el edificio quedó sin destino alguno y en estado ruinoso. Había cementerio desde 1871 al pie de la huerta de Capuchinos y retirado del camino.

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