La derivada de la ganadería, como se ha señalado antes, era la del queso y la de la lana. El queso requería la recogida de la leche ordeñando o muyendo las ovejas una a una y procediéndose a la fabricación del queso y del requesón según técnicas tradicionales, lo que, unido a la calidad del pasto, daba al queso roncalés un sabor peculiar que hoy en día no se da pero sí en el valle de Baretours y en concreto en Areta como lo hemos podido comprobar. Es de señalar que para hacer el queso venían queseros zuberotarras o baretoneses. Hoy existe una gran fábrica de quesos en Roncal en la que se emplean 30 trabajadores con una producción de 800.000 kg. anuales. Si se ordeñan en el Valle apenas 2.000 ovejas madres que a todo tirar producen 250 gramos de leche diarios, queda de manifiesto que parte de la leche se importa de otros valles del país. El ordeño dura 40 días, desde el 30 de mayo al 10 de julio. La Empresa Navarra de Quesos S. A., (ENAQUESA) ha sido decisiva para la Denominación de Origen concedida por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación con fecha 2 de marzo de 1981, publicada en el B. O. E. n.° 85 del 9 de abril del mismo año. La industria de la lana casi ha desaparecido, requiriendo el esquileo y otros cuidados para tenerla lista para la venta. A principios del siglo XX era fundamental la venta de las lanas como una de las más fuertes entradas de la casa ganadera. Otras industrias subsisten, como algunos aserraderos de madera, hostelería y otros derivados del turismo, como arriendo de habitaciones, comedores, bares y otros servicios. Han desaparecido las tejerías, a las que solían venir tejeros valencianos, artesanos cuchareros utilizando la madera de boj hilados, etc.