Kontzeptua

Lamina (1987ko bertsioa)

Ofrendas a las lamías. Dejando a la noche una jarra de sidra en la bodega o un bollo en la cocina donde se hubiese cocido pan, las lamias lo consumían (Orozco). En las casas ponían sobre la mesa de la cocina panes de maíz; luego, de noche, venían las lamias y los comían (Saint-Martin-de-Arberua). En otros sitios los pastores llevaban, como ofrenda, cuencos de leche y de cuajada a ciertas cuevas, supuestas habitaciones de lamias (Arraiz -Ulzama-). También los labradores dejaban en la orilla de sus heredades algunos alimentos para las lamias. Estas venían a la noche y consumían la ofrenda y, agradecidas, hacían algunas labores en las tierras de sus devotos (Uhart-Mixe).