Existen diversas teorías acerca del origen de la festividad, unas más plausibles que otras. Algunas, planteadas por diferentes autores, han quedado en descrédito con el paso del tiempo. Otras se siguen defendiendo hoy en día, intentando buscar en las Saturnales romanas, al igual que en el resto de festividades aquí expuestas, la raíz de los festejos carnavalescos.
La Saturnalia o Saturnales se celebraron en honor al dios Saturno, de forma muy irregular entre los siglos V a.C. y V d.C. Con el tiempo, en dicho período, se suprimieron y se promulgaron en diversas ocasiones; según el emperador existente en cada momento. Al parecer, en un principio eran un único día, el 17 de diciembre. Después, en tiempos de Gayo César (Julio César) se extendieron a tres días (17, 18 y 19), aunque posteriormente llegaron a ser hasta siete días: desde el 17 al 23 de diciembre.
En dichas fiestas se hacían banquetes privados, se daba cierta licencia a los esclavos y se entregaban regalos. Aquí se aprecia un elemento enlazado directamente con la Navidad y, también, con el Carnaval, ya que se ha de tener en cuenta que el calendario romano se remonta, según cuenta la leyenda al 753 a.C., año de la fundación de la ciudad por Rómulo. Es entonces cuando el año comenzaba en el mes de marzo (mes consagrado al dios Marte) y finalizaba en el de diciembre (de december = décimo mes). El período de diez meses dio paso, en el reinado de Numa Pompilio, a doce.
Este tipo de intercambio de roles entre amos y esclavos, posteriormente se fundamenta en los siglos XIV-XVI en las, no por menos importantes, conocidas como las "Fiestas de Locos".
La máxima expresión de este hecho ha quedado patente en dos conmemoraciones que aún se conservan: la "Fiesta del Obispillo", durante la cual se deja a un niño, vestido con atributos santificados, el cargo de Obispo, el día de San Nicolás (6 de diciembre) y el Día de los Inocentes (28 de diciembre); y la coronación del "Rey de la Faba".
La historia se encuentra jalonada de actos y elementos propios del Carnaval que se han ido modificando por necesidades sociales y culturales.