Brasil: Padre José Anchieta. Este jesuita descendía, por parte paterna, de Urrestilla, en Azpeitia, Gipuzkoa. Su madre, D.ª Mencia Díaz, era canaria. Su labor de misionero en Brasil le dio celebridad. Renunció en 1585 al cargo de Provincial de la Orden para dedicarse a los indios. Visitó el interior del Brasil relacionándose con las tribus indígenas cuyo idioma aprendía, hasta tal punto que compuso un Arte de Gramática de la lengua más usada en la costa del Brasil. Su obra fue ingente fundando poblaciones, entre ellas Sao Paulo y un sin número de hospitales, colegios, escuelas e iglesias. Logró un trato de paz entre los indios y el gobierno portugués. En territorio indio y sin medios materiales escribió sobre la arena de las playas para grabarlo después mejor en la memoria: tal su poema de 41.172 versos B. Virginis Vita. Los poemas escritos en guaraní los aprendían los indios de memoria alcanzando fama y amor de las tribus indias. Dominaba nueve lenguas indígenas, el portugués y el español.