Los musulmanes proyectan e intentan la toma de Pamplona (911). Quien primero de los dos se mueve es el cabecilla de Huesca. Moviliza las gentes armadas del pequeño reino y penetra por el camino Sos-Lumbíer en dirección a la capital. El cronista Ibn Idhari nos dice que llegó primeramente al castillo de Hiçn el-Berber incendiando los alrededores y destruyendo las iglesias de la región. Esto ocurría en el mes de ramadán, 11 de mayo de 911 . Renuncia luego al proyecto de ir al encuentro de su aliado el tudelano Ibn Lupo y se retira a su castillo de Charat Kachtila, situado probablemente entre Isuerre y Urriés, junto a Sos, lugar que sería fronterizo de moros y vascones. Don Sancho se mueve hacía ese lugar. Llega esta noticia a oídos del oscense y huye con algunos de sus hombres más allegados. Ante esta huida -dice el mismo cronista- los soldados pierden la serenidad y la consecuencia fue la derrota de la guarnición del castillo. «Abd Allah ben Lupo, cuando supo que Ibn Tawil había tenido miedo a un encuentro con Sancho, fue con los musulmanes que tenía junto a sí a atacar el castillo de Hiçn Lawaza (Luesia) que formaba parte de las posesiones de Sancho, y mató allí a algunos de sus defensores. Después, a la vuelta, encontró un grupo de jinetes que mandaba Sancho, matando a algunos y haciendo prisioneros a varios.»