Con la caída de la dictadura (1923-1930) y la semidictadura de Berenguer (1930- 1931) reaparecen las Emakumes como institución a una con las demás entidades vascas, en junio de 1931. Para entonces ya se habían unido ambos partidos vascos en uno solo, el P.N.V. y el diario "Euzkadi" representaba a toda la familia nacionalista vasca. El 25 de junio se nombraba la nueva Junta Directiva: presidenta: Karmele de Errazti; vicepresidenta: Concepción de Gangoiti; secretaria: Alicia de Aretxabaleta; tesorera: María Jesús de Ibaseta; vicesecretaria: Consuelo de Gallastegui; vocales: Jesusa Fresnedo de Arbeloa, Paulina Ramos de Orueta, y Concepción de Unzueta. El reglamento fue aprobado por el G.C. el 15 de junio de 1931. El art. 1.° decía: "El objeto de esta Asociación será la unión de todas las mujeres vascas amantes de Jaungoikua eta Lagi-Zarra, para difundir por Euzkadi, valiéndose de cuantos medios estén a su alcance y en consonancia con su sexo y condición, la doctrina que en el referido lema se encierra, desarrollando sus actividades e iniciativas principales, orientadas al aspecto social vasco y de carácter cultural y benéfico". En el art. 3 se declaraba que "es deber de las euskaldunes asociadas, hablar el euskara en los locales de la Sociedad y de las que no lo sean aprenderlo". Los demás artículos se refieren a la admisión (desde los 12 años) y expulsión y readmisión de asociadas. Este reglamento fue reformado añadiendo la siguiente disposición sobre el objeto de la Organización: "Asistir moral, material, patriótica y políticamente, a todos aquellos hermanos nuestros en Ideal y Raza (pueblo), que lo necesiten. Tratará de aliviar los dolores del necesitado y nivelar el desequilibrio de justicia, mediante la práctica de la caridad cristiana". En la Memoria de "E.A.B." de 1932 se añade: "ansiamos y perseguimos la formación de hogares vascos henchidos de sentimiento patrio, de vida patria, en una palabra. Pretendemos que, por nuestra mediación, emakumes, cada hogar vasco sea una pequeña patria tal y como la deseamos; fuerte y vigorosa, físicamente, y profundamente cristiana". En el citado manifiesto se especifican los fines de la Asociación, en la sociedad familiar, en la sociedad patriótica, en la sociedad ciudadana, en los aspectos político y social.
Bernardo Estornés Lasa