Concept

La nobleza vasca en Iparralde

Los vascos disfrutaban de esos privilegios en una época en la que la libertad y todos los derechos eran exclusivamente de los nobles. Si la nobleza, más allá de ser sinónimo de caballería y vasallaje es sinónimo de libertad, la afirmación realizada por ciertos autores, entre ellos, la realizada por Sanadon que era el obispo constitucionalista de Bayona (SANADON, Don Barthélémy, Jean-Baptiste: Essai sur la noblesse des Basques..., Pau, 1785) respecto a la nobleza vasca es cierta. "Solo ellos han sabido cruzar los dolorosos y largos siglos de la Edad Media sin ser sometidos al deshonor de la servidumbre... y, en realidad, todos los vascos eran nobles, tanto como los excelentes varones de las cortes francesas y españolas, ya que sus leyes no dependían de una superior" (Elisée RECLUS); (Traducción adaptada del francés).

Por otra parte, ese mismo criterio de libertad personal es la que argumentó el rey de Castilla al reconocerles a los vascos la hidalguía universal. En sus palabras: "Ese carácter de hombre honesto y sincero, que no sufre ninguna servidumbre, es el equivalente jurídico de la nobleza" (Traducción adaptada del francés). Esa nobleza e hidalguía era innata no concebida con el tiempo y además era una hidalguía real, relacionada con la casa y no con la persona. En 1314 el rey de Castilla reconoció la hidalguía universal de los alaveses, en 1394 hizo lo propio con los vizcaínos y en 1476 llegó el turno de los guipuzcoanos. Esa hidalguía de los vascos fue ratificada por Fernando el Católico en 1480, por Carlos V en 1527, por Felipe III en 1608 y por Fernando VI en 1754. Del mismo modo, en el siglo XV el rey de Navarra nominó hidalgos a los ciudadanos de los cuatro valles de Navarra. Los habitantes del valle de Baztán también fueron nombrados nobles según los libros de fuego de 1366-1427.Atendiendo a un proceso que se alargó desde el año 1437 hasta 1440, se observa lo a continuación dispuesto sobre los habitantes del valle que vieron peligrar su hidalguía: "Los nobles son honestos y sinceros, y están libres de cualquier servidumbre" (Traducción adaptada del francés) En consecuencia el rey de Navarra reconoció su hidalguía en 1440.

Esa hidalguía quedó del mismo modo probada varias veces en el fuero de Vizcaya (Ley XVI del título 1 del Fuero Viejo). Los agentes del rey se quejaban por no poder someter a ningún tipo de tortura a los vizcaínos, pues esa era la medida tomada para los plebeyos. Los vizcaínos lucharon en muchas ocasiones en favor de su amenazada hidalguía. De igual manera, los cuadernos de las Hermandades y los fueros de Guipúzcoa reconocían la hidalguía guipuzcoana (Cuaderno de Hermandad de Guipuzcoa (1397) y capítulo II del título segundo de Nueva recopilación).

Cuando el rey quería nombrar hidalgo a un vasco por los servicios dados o por buenas fianzas, nombraba noble sus tierra, y no a la persona. El los archivos se pueden encontrar muchos ejemplos de lo citado. Algunas casas eran tomadas como nobles y se nombran como tal. Pero no se diferenciaban con las otras casas, es decir, eran como las casas francas o las casas rurales, y no había un solo privilegio de hombre ni tan siquiera un privilegio de honor en lo que respectaba a la primogenitura. Ya más tarde, Garat, quien sería el tercer diputado del estado el los Estados Generales de 1789, dijo así en una conferencia celebrada en una academia de Burdeos en 1784: "el campesino esta orgulloso con el título que le hemos otorgado y lo utiliza en todas las ocasiones como título honorífico, y se sienta en la mesa del hidalgo y piensa que ese es su lugar, y el mimos hidalgo piensa de igual manera" (Traducción adaptada del francés).