Udalak

GALLIPIENZO

Villa fronteriza. Al separarse Navarra y Aragón, viene a ser uno de los topónimos que se mentan en la fijación de términos del reino de Aragón que, según relata la Crónica de San Juan de la Peña, hizo el rey aragonés Ramiro el Monje (1134-1137) antes de legárselo a su yerno Ramón Berenguer IV, conde de Barcelona. Una de las líneas fronterizas, según precisa la referida Crónica, venía a ser el curso del río Aragón desde el punto en que se le juntaba el Irati hasta el lugar llamado Vadoluengo y hasta el lugar llamado Gallipienzo (cfr. Crónica de San Juan de la Peña. Versión latina e índices preparados por Antonio Ubieto Arteta, Valencia 1961, p. 97). V. IRATI, Río. Una heredad de Gallipienzo aparece como objeto de donación, junto con las villas de Roncesvalles, Urroz y Obanos, en 1157, por el conde de Barcelona a favor de García Moravid. El 22 de mayo de 1277, Gonzalo Pérez, hijo de Pedro Martínez, prestó homenaje a la reina Juana, en la persona de Eustaquio de Beaumarche, gobernador del reino, por el castillo de Gallipienzo.