Lexicon

LIBERALISMO

La Unión Liberal (1856-l868). La derecha liberal española halla, desde la vicalvarada de 1854, un hombre fuerte, O'Donell, y un instrumento de gobierno, la Unión Liberal. Y no en vano el manifiesto del nuevo gobernante (Manifiesto de Manzanares) era obra del joven Cánovas. Un importante sector del liberalismo vasco evoluciona hacia este nuevo partido que englobará a la parte más dinámica del modernantismo y a los ya sosegados progresistas (P. Illarregui, Fermín de Lasala por ej.). Unese a estas corrientes la convergencia de gran parte de dirigentes carlistas que, muerto Montemolín en enero de 1861, no ven viabilidad al carlismo. Sin embargo, la Unión Liberal tropieza en el país con la enemiga implacable del clero, en especial a partir de julio de 1865 en que el Gobierno reconoce al nuevo reino de Italia, creado en 1861 . Esto fue especialmente patente en las elecciones de ese año en que el clero impuso una llamada «candidatura católica» (con significados carlistas tales como Cándido Nocedal, Aparisi y Guijarro, Navarro Villoslada) que derrota en Navarra a los siete candidatos de la Unión Liberal calificados de «impíos». La Revolución del 68 precipitará este intervencionismo de clero que intensifica la presión moral de la iglesia sobre sus administrados hasta el punto de conseguir que el carlismo vuelva a la escena política vasca, cope las elecciones en el País Vasco y, no contento con esto, recurra a la vía armada.