Monarquía y Nobleza

Sancho Garcés III El Mayor (versión de 1996)

Vizcondado de Laburdi (1021). Se supone que Sancho el Mayor erigió a Laburdi en vizcondado entre 1021 y 1023 a favor de Lupo Sánchez, mayordomo del rey. Es la época en que también aparecen a la luz pública de la historia los condados pamploneses de Guipúzcoa y de Vizcaya. Los sucesivos vizcondes habrían sido Fortún Sánchez (1060-62), hermano del anterior; Fortún Sánchez II (1062-1099), y sus descendientes. Según Jaurgain y Pérez de Urbel siguieron vinculados al reino de Pamplona. El día 18 de octubre de 1035 moría Sancho el Mayor en el apogeo de su poder, cuando tenía unos 43 años de edad. Es un rey pirenaico por excelencia, ya que sus dominios a títulos diversos, herencia, conquista, vasallaje, se centran en el Pirineo entendido como tal la cordillera interior y su continuación la cantábrica, paralela a la costa. No obstante, el patrimonio territorial propiamente dicho abarcaba solamente las tierras de habla vasca, navarras y occidentales. El problema de los hijos se hallaba íntimamente unido al problema del reparto y de la sucesión. Cuatro hijos vivían al tiempo de morir el monarca; uno, Ramiro, el primero habido durante su soltería con Sancha de Aibar, y por tanto con derechos limitados aunque se hallaba reconocido por el rey; otro, García, el primero habido del matrimonio con Munia, la reina, quien, como primogénito, debería heredar el reino matriz de Pamplona; y después, Gonzalo y Fernando, que eran los más jóvenes. Según la tradición navarra, las dotes territoriales otorgadas a los hijos deberían estar vinculadas en cierto modo al reino matriz, ya que le debían fidelidad. A Ramiro le asigna la provincia aragonesa, que erige en reino.