Concepto

Patrimonio Cultural

Dado el creciente y siempre en extensión conjunto de elementos que pueden llegar a formar parte del patrimonio cultural en una sociedad, unido a que la mayor o menor importancia de un patrimonio es el resultado de una compleja interacción entre lo que los expertos consideran como más relevante y las valoraciones que hacen los sujetos de su propio patrimonio, resulta sumamente complicado seleccionar cuáles son los principales patrimonios del acervo cultural vasco. Por ello, a continuación se presentan algunos de los tipos de patrimonio en los que se puede considerar que la sociedad vasca posee elementos destacables, donde se incluirá la mención de algunos ejemplos a modo de ilustración, sin que ello signifique que se agoten todos los posibles patrimonios dentro de esa sección ni que sean necesariamente los más significativos.

Dentro del patrimonio arqueológico se encuentran los restos prehistóricos e históricos encontrados en yacimientos que dan cuenta de las características tanto culturales como naturales de un determinado lugar en momentos concretos del tiempo. Ejemplos de yacimientos prehistóricos los encontramos en el yacimiento de Axlor en Dima (Bizkaia) o el de Irikaitz en Zestoa (Gipuzkoa). Por otra parte, en Euskal Herria también destacan los yacimientos arqueológicos con restos romanos: en Irún (Gipuzkoa) con el Museo Romano Oiasso, en el yacimiento arqueológico de Iruña-Veleia en Trespuentes y Villodas (Araba), el asentamiento romano en Forua (Bizkaia) o el puerto romano de la Ensenada de Portuondo entre Sukarrieta y Mundaka (Bizkaia).

El patrimonio etnográfico comprende todos los bienes culturales que están relacionados con las costumbres y tradiciones de los pueblos. En el caso vasco hace especial referencia al folklore vinculado principalmente a su mundo rural: danzas típicas, trajes folclóricos, artesanías, casas tradicionales, aperos de labranza, y otros instrumentos y objetos varios. Parte de este numeroso y amplio patrimonio puede ser consultado en varios centros patrimoniales como el Museo Vasco de Bilbao (Bizkaia), el Museo Euskal Herria de Gernika (Bizkaia), el Museo Etnográfico de Artziniega (Araba) o el Museo San Telmo de Donostia (Gipuzkoa).

El patrimonio arquitectónico puede definirse como patrimonio cultural edificado, lo que comprende el conjunto de construcciones y edificaciones que forman parte de la cultura y de la historia de un pueblo, comunidad o sociedad. En el caso vasco existe un amplio conjunto de patrimonio edificado eclesiástico, con una gran cantidad de ermitas -Santa María de Zumarraga (Gipuzkoa), iglesias -Básilica de Santa María en Portugalete (Bizkaia) y catedrales -Santa María de Vitoria (Araba)-. Asimismo, otro ejemplo son los cascos históricos de muchos pueblos de Euskal Herria, como los que hay en Araba, donde abundan los rastros de localidades amuralladas y otros restos medievales: Labastida, Laguardia, Salinillas de Buradón o Labraza entre otros. Las construcciones del pasado industrial vasco, aunque éstas ya podrían entrar en la siguiente categoría, son también relevantes, caso, por ejemplo, del Puente Bizkaia o Puente Colgante, que une los márgenes de la ría del Nervión entre Portugalete y Getxo (Bizkaia).

Como parte del patrimonio industrial se pueden identificar los bienes culturales que formaron parte de la actividad industrial de un país. Euskal Herria destaca por poseer un rico patrimonio industrial asociado a la siderurgia -Altos Hornos de Bizkaia en Sestao (Bizkaia), el Pobal en Muskiz (Bizkaia), Lenbur en Legazpia (Gipuzkoa)-, la minería -Museo de la Minería en Gallarta (Bizkaia) o la industria textil -Boinas la Encartada en Balmaseda (Bizkaia)-.