Léxico

MARINA

La Guerra de los Treinta Años (1618-48) y su prolongación contra Francia (1635-59). En 1617 el señorío ofreció a la Corte la construcción en Zorroza de una escuadra propia de Vizcaya de 6 galeones y 2 pataches a cambio de que toda su tripulación y oficialidad fueran del país. Se aceptó y en 1619 se hizo a la mar esta escuadra al mando del general portugalujo Martín de Vallecilla. Por este tiempo existía también la escuadra de Guipúzcoa, con 17 naves, al mando del almirante Antonio de Oquendo. En 1621 finalizó la tregua con Holanda y se ordenó formar una armada de 30 navíos y 6 pataches con las tres escuadras de Vizcaya, Guipúzcoa y Cuatro Villas. Los primeros años de la guerra apenas se notaron en aguas de Euskalherría. En 1624 se puso la costa en estado de defensa ante el temor de un ataque holandés y en 1626 el corsario de Fuenterrabía San Francisco apresó a un barco francés del mismo nombre y lo condujo a Bilbao. En esta misma época, durante las guerras de religión en Francia, también la flota bayonesa se mostró activa en las operaciones que se desarrollaron en torno a la isla de Ré y La Rochelle ( 1627-28). En 1631, una flota hispano-portuguesa, con varias naves vascas, mandada por Antonio de Oquendo destrozó a otra holandesa cerca de Pernambuco. En 1635, Francia entró en la contienda al lado de Holanda y los protestantes alemanes. En julio de 1636 el rey ordenó a los navíos de Vizcaya y Cantabria que se unieran a la armada de Portugal y emprendiesen la persecución de la francesa en el Atlántico, a la vez que la escuadra de Cádiz del almirante Antonio de Oquendo debía unirse a la de Nápoles con el mismo propósito en el Mediterráneo. También se armaron en corso numerosas embarcaciones para atacar el tráfico comercial francés. A finales de año, las tropas hispanas cruzaron la frontera y ocuparon San Juan de Luz mientras una escuadrilla del país capturaba algunas embarcaciones labortanas. En 1637, fuerzas francesas desembarcaron en Poveña pero se les obligó a reembarcar y la escuadra de Cantabria, formada por naves de Cuatro Villas y Vizcaya apresó 4 mercantes y hundió 12 más. En 1638 fueron los franceses quienes invadieron Guipúzcoa y sitiaron Fuenterrabía el 4 de julio. Su flota derrotó a la española en agosto en aguas de Guetaria. Mandaba las naves francesas el arzobispo-almirante de Burdeos, Henry d'Escobleau de Sourdis, que disponía de 44 galeones, 4 urcas, 2 pataches, l2 transportes y 12 brulotes. Frente a ellos, la escuadra de Lope de Hoces sólo contaba con 12 galeones y 5 naves más pequeñas, así como 30 mercantes. De todos ellos únicamente pudo escapar el galeón Santiago que logró arribar maltrecho a Pasajes. Sin embargo, por tierra, las tropas españolas lograron rechazar a las francesas. El declive del poderío naval hispano se confirmó claramente con la derrota de Las Dunas (21-10-1639). Los combates previos a la batalla se produjeron los días 16, 17 y 18 de septiembre entre una pequeña escuadra del almirante holandés Tromp y la flota del almirante Antonio de Oquendo formada por 67 naves. Pero reforzada luego la escuadra de Tromp hasta reunir 110 naves, atacó por sorpresa a la de Oquendo y la destrozó completamente. En otros combates destacaron el eibarrés Carlos de Ibarra que derrotó a una flota holandesa en Cartagena de Indias (1638) y el orduñés Francisco de Pimienta, general de la Armada del Océano, que derrotó a la flota francesa en aguas de Italia (1646). Aunque la guerra con Holanda finalizó en 1648 aún se prolongó con Francia hasta 1659 en que se firmó la Paz de los Pirineos. Las últimas acciones las llevaron a cabo los corsarios guipuzcoanos en 1658 atacando barcos labortanos que hacían el tráfico con Vizcaya por existir, a pesar de la guerra, un tratado de amistad y comercio que unía a Laburdi y el Señorío. Otras presas de los corsarios guipuzcoanos fueron los barcos portugueses y holandeses que cruzaban también por aquellas aguas. Después de finalizado el conflicto en 1659 las acciones de corsarios vizcaínos, guipuzcoanos y labortanos aún prosiguieron en años sucesivos (v. COR- SARIO, MARINO).