Concept

Caza de la Ballena

Los primeros datos acerca del consumo de ballenas por el hombre se sitúan en el Paleolítico Superior. La localización de arte mueble con representaciones de ballenas así como la aparición de restos de éstas indican el conocimiento que la sociedad de la Edad de Piedra tenía de estos mamíferos. La existencia de estos testimonios no permite afirmar que su presencia en los yacimientos responda a una caza en el mar, sino más bien que se trate de la observación y al carroñeo de cetáceos varados en las zonas costeras.

Lonja 2010
Lonja 1920-1924

El aprovechamiento de los cetáceos varados en la costa ha sido una práctica habitual a lo largo de la historia. Cuándo se comenzó a capturarlas en el mar es una incógnita, aunque conviene resaltar que se podía realizar desde pequeñas embarcaciones de remos, tal y como se ha realizado en el litoral vasco durante siglos. Además, en los momentos iniciales en los que esta actividad no se había generalizado, los cetáceos no se alterarían con la presencia del hombre.