Concept

Historia del Arte. Neoclasicismo (version de 1992)

Arquitectura religiosa. En lo que se refiere a la arquitectura religiosa, no es extensa la actividad neoclásica. A veces se edifican partes complementarias de los templos, como los pórticos, de los que el primero es el de la iglesia de San Sebastián de Soreasu, en Azpeitia, cuyo diseñador, el arquitecto Ventura Rodríguez (con la ejecución de Francisco de Ibero), inicia en 1771 el gusto neoclásico en Vasconia con una organización a manera de arco triunfal. Otras portadas son ya de menor entidad, como el pórtico columnario de Narvaja, trazado por Ramón de Abalos, que ejecuta en 1801 Nicolás de Aramburu, o el pórtico de la iglesia de Aberásturi (1801). A Olaguíbel se debe la temprana fachada de la iglesia de las Brígidas, en Vitoria, proyectada en 1783. Continúa la construcción de torres, a partir del modelo barroco depurado de ornamentación. El más importante diseñador del tipo de torre neoclásica es el vitoriano Olaguíbel, quien en la torre de Arriaga (1787) define un ejemplo que será continuado por un gran número de templos alaveses. También se interviene ahora en la remodelación del presbiterio de algunos templos, como hace Olaguíbel en la Colegiata de Vitoria, o el proyecto diseñado por Silvestre Pérez en la iglesia de Santa María de Tolosa, o se efectúa una reconstrucción como la que lleva a cabo Francisco Javier de Capelastegui en la iglesia de San Martín de Amoroto. La culminación de la producción arquitectónica de Ventura Rodríguez, no sólo en Navarra sino en España, se nos muestra en la fachada de la catedral de Pamplona, erigida tras la destrucción de la románica edificada por el maestro Esteban. Después de quince años de trabajos continuados por canteros navarros de singular maestría, la fachada de frontis de cuatro columnas de tipo corintio está casi terminada. Con gran cuidado se han labrado tambores de columnas y sillares, que maestros cualificados tienen ya casi ensamblados. Mas la guerra de la Convención detiene los trabajos. Terminada en 1795 esta contienda, se reanudan en 1808 las labores. Los arquitectos José de Armendáriz y Miguel Marcoleta son los artífices de la remodelación externa de la parroquia del Salvador de Arróniz (Merindad de Estella), iglesia de origen medieval, la más interesante del rico valle de San Esteban de la Solana. La primitiva fábrica fue construida sobriamente en los albores del s. XIII, bajo la influencia del Císter; sufrió remodelaciones en el s. XVI, y sobre todo en el XVIII, en el que tanto el crucero como las capillas laterales fueron transformados en un gallardo barroquismo en el que se emplearon finas yeserías. Será en los primeros años del s. XIX, con la construcción de la fachada externa y de la torre, cuando adquiera un sentido neoclasicista, siguiendo el gusto imperante. La parroquia de Arróniz es una de las construcciones neoclásicas más hermosas de Navarra, en gran parte debido a la nobleza de su cantería, tanto por la calidad de la piedra como por su elaborada ejecución. Su torre será imitada en otras iglesias de la región, como la de San Martín de Arinzano (Aberin). La primera iglesia completa fue la de la Asunción de Motrico, proyectada en 1798, a los dos años del regreso del arquitecto Silvestre Pérez de una amplia estancia en Roma, aunque se prolongó su fábrica hasta mediados del s. XIX, corriendo a cargo de los arquitectos Manuel Vicente Laca y Mariano José Lascurain. Además de otros proyectos eclesiales en Basigo de Baquio y Durango, trazó Silvestre Pérez, tras su exilio en 1820, la iglesia de Santa María de Bermeo, cuya construcción también se retrasó hasta mediar el siglo, corriendo a cargo de los arquitectos Luis Arauco, Vicente Calleja y Antonio de Goicoechea (serían las trazas de Silvestre Pérez, de 1808, las que se realizaran). También de plan central es la sacristía de la parroquia de San Andrés de Elciego, que hace Olaguíbel entre 1789 y 1794. De autor desconocido destaquemos finalmente la iglesia alavesa de Ibarra, en Aramaiona, que sigue el modelo neoclásico de planta central con cúpula.