Festivals-Événements

Fiestas Euskaras

Como padre de la idea, el año 1893 Abaddie fue recibido en Azpeitia con músicas y canciones que 150 muchachos y adultos le dedicaron entre los aplausos de todo el pueblo.

El poeta vasco P. José Ignacio Arana S.J. compuso al efecto varios versos que fueron cantados por el barítono azpeitiarra Beloqui:

Agur gure biotzeko
Aita Jaun aundiya
Abadiko Antoniyo
Aitorren semia
Zurekin poztutzenda
Azpeitiko erria
Zeralako esuskaldunen
In maitalarria

[Agur, padre y señor de nuestro corazón, Antonio de Abadie, hijo de Aitor; contigo se alegra el pueblo de Azpeitia, porque eres tan amante de los vascos].

Aprica-tar beltz eta
Ijito-tar etan
Brasil-go erreiñu ta
Europa-ko etan
Zure jakinduria
Gon da loretan
Maitagarria zera
Guretzat benetan.

[Tu sabiduría ha florecido entre los negros de Africa y los egipcios, en el Brasil y en los reinos de Europa; eres digno de nuestro amor].

El programa comenzó el 10 de septiembre con una diana y kalejira a cargo de la banda y el tamboril seguidos de la Misa Mayor a la que acudió el Ayuntamiento en Corporación y el propio Abbadie. A continuación desde la Casa Consistorial presenciaron el primer concurso de terkaris, venciendo en la carrera el aizkolari Arrospide premiado con 60 francos de oro. Asistieron al partido de pelota a blé y ezcuz (a mano desnuda) y por la tarde al concurso de bersolaris en el que Pello-errota, molinero de Asteasu, ganador del mismo, recibió 100 francos de oro. La jornada terminó con un acto literario - musical en el Círculo Católico.

El lunes 11 comenzó como el día anterior con músicas, misa y volteo de campanas seguidas del concurso de irrintzilaris y exhibición de ezpata-dantza. La lluvia deslució el resto del día salvándose la velada musical celebrada en la Escuela de Chicos.

El martes, último día, se celebró el tradicional mercado del pueblo y, por la mañana, la carrera de chicas con herradas. En el frontón se jugó a blé y a guante pequeño de mimbre. Jugaron Luis y Vicente Mardura contra Arru, el francés, y Viquendi el zurdo, el donostiarra. Ganaron los segundo 40-35 y recibieron 400 francos de oro. En el concurso de txistularis se repartió el premio entre todos y en el de vacas lecheras se llevó las 100 pesetas Florentino Orendaandi, de Azpeitia.

El canto del Guernikako Arbola dio por terminadas las primeras Fiestas Euskaras teniendo como emblema los versos del P. José Ignacio Arana S.J.

¡Euzkera bici-bedi¡
Bizi Euskaldunak¡
Beren kristautasunaz
Ondo esagunak
Gure erriaren alde
Gazte ta aidunak
Obtura gordetzaile
Alkarren lagunak.

[Viva el euzkera, vivan los vascos¡, conocidos en todas partes por su religiosidad, agrupados jóvenes y viejos a favor de nuestro pueblo].