Festivals-Événements

Fiestas Euskaras (version de 1982)

Denominación genérica bajo la que ha solido encuadrarse una serie muy diversa de celebraciones literarias, deportivas, agrícolas, musicales, folklóricas, etc. con hincapié manifiesto sobre el euskara y los rasgos diferenciales.

Destacan, dentro de este género, los certámenes bertsolarísticos iniciados por Antoine d'Abbadie en 1853 (Urruña, Lapurdi), a los que se sumó la poesía escrita y, en 1873, el trabajo en prosa. Ver CERTAMEN. En 1879, por primera vez, tal tipo de acontecimiento tiene lugar al Sur del Bidasoa, en Elizondo, constituyendo un rotundo éxito. Poco a poco la fiesta va ganando en profundidad cultural; en la de Vera de 1880, por ejemplo, se ofrece una medalla de oro al mejor estudio histórico-critico sobre "Constitución e importancia de las Cortes de Navarra".

Promocionan estas manifestaciones la Asociación Euskara de Navarra, los Ayuntamientos, la Sociedad Euskal-Erria de Bilbao, Diputaciones, y se celebran a uno y otro lado de la frontera, de forma anual. Contagiada por este entusiasmo la Diputación de Guipúzcoa acuerda celebrar por su cuenta y anualmente fiestas de este tipo. Para ello trazó un ciclo de 18 localidades en las que, a partir de 1894, tendrían lugar las celebraciones en las que ocuparon un destacado lugar los concursos de ganado y productos agrícolas. Una nueva modalidad se inaugura en 1897 con las Fiestas de la Tradición vasca de San Juan de Luz que incorporan a elementos oficiales -prefecto, obispo, delegado del Ministerio de Cultura, alcaldes, directores de sociedades culturales, cargos electos de ambos lados de la frontera- a las celebraciones en las que se incluyen ciclos de conferencias y exposiciones.

Las Fiestas de la Tradición se repitieron en 1900 también en Donibane y ya acrecidas con excursiones en 1904 en Donostia y en Irún, organizadas por Eskualzaleen Biltzarra y otras por la Diputación de Guipúzcoa, coexistiendo con las más campestres fiestas vascas que prosiguen celebrándose hasta 1914. Tras la guerra mundial volvieron a reemprenderse en Iholdy (Baja Navarra) en 1920 y en Fuenterrabia (Guipúzcoa) en 1925. En Guipúzcoa fue la entidad "Euskalerriaren-Alde" la que vino a ocuparse de su organización. En setiembre de 1927 el Ayuntamiento de San Sebastián celebró una fiesta vasca de una semana de duración a la que denominó Semana Vasca que luego se repetiría periódicamente bajo el patrocinio del recién creado CAT (1928). En su comité organizador vemos como presidente de honor a José Antonio Beguiristain, alcalde de San Sebastián, y como presidente efectivo a Antonio Orueta acompañado de los vocales José Aguirre, Toribio Alzaga, Secundino Esnaola, José María Olaizola, Beltrán Pagola, Ramón Usandizaga, Francisco Urcola y Juan B. Juanena.

Las fiestas vascas prosiguieron su marcha cada vez más enriquecidas, -ej., concurso de pregoneras de pescado hasta ser segadas por la guerra en 1936 y 1940-45. En 1940 hay un intento de resurrección de las de San Sebastián por parte del CAT y de "El Diario Vasco" con todas las connotaciones de postguerra que pueden imaginarse. Con la reanudación plena de las actividades del CAT, entre 1950 y 1951, reaparece tímidamente la tal semana donostiarra. Las Fiestas Euskaras comenzaron a recelebrarse teniendo como escenario la Plaza de la Trinidad donostiarra. Patrocinadas por organismos como el CAT y la Agrupación Sindical de Sidras, concedían un importante espacio a la gastronomía. Con los años fueron ampliándose, organizadas por el CAT, patrocinadas por el Ayuntamiento de San Sebastián, la Diputación de Guipúzcoa y la colaboración del Seminario de Filología Vasca "Julio de Urquijo" y las Cajas de Ahorros Municipal y Provincial. Pasaron a durar una quincena de setiembre, durante la cual se celebraban certámenes literarios y de danzas, juegos populares, arte, teatro, sokamuturra, alarde de txistularis, concursos de arrastre y aitzkolaris, de trajes, bolos, traineras, txalaparta, romería, bebidas, quesos, etc. Constituyeron, durante los años de la dictadura, un reducto vasquista de importancia.