Partis politiques

Euzko alderdi jeltzalea - Partido Nacionalista Vasco

Cuando se produce la caída de la Dictadura de Primo de Rivera, la división nacionalista es el principal problema de aquel movimiento. La Juventud y el diario «Euzkadi» inician una campaña en favor de la reunificación. Se crea una comisión que, en abril de 1930, había llegado a un principio de acuerdo. El 16 de noviembre de 1930 se celebró en un cine de Bergara la Asamblea Nacional de Unificación, que recuperará el primitivo nombre de Partido Nacionalista Vasco. Sin embargo, no se logrará la unanimidad. Un sector, que había visto cómo no se discutía una de las ponencias para aquella Asamblea, abandona el partido. Va a nacer Acción Nacionalista Vasca, agrupación progresista, que basará su estrategia en la aconfesionalidad y la búsqueda de una solución al "problema vasco" mediante la alianza con las fuerzas izquierdistas españolas. El 13 de abril de 1931 se proclamaba la República en Eibar.

Un día más tarde, ocurría lo propio en todo el Estado. El período republicano va a ser para el PNV difícil e intenso, al mismo tiempo. Su no-participación en la conspiración republicana -Pacto de San Sebastián- va a marcar sin duda acontecimientos posteriores. Sus objetivos fundamentales en esta etapa, van a ser la derogación de las leyes abolitorias de los Fueros de 1839 y 1876 y la obtención de un estatuto de autonomía. La proclamación de la República determinó un cambio decisivo en las posiciones de los partidos nacionalistas. El PNV siendo como era el partido más influyente, se arrogó la dirección del movimiento a favor del Estatuto, y se benefició del prestigio consiguiente de esta empresa. Sin duda, el gran tropiezo del PNV en la primera etapa republicana fue el de adoptar una estricta línea confesional en un régimen laico.

Recordemos, por ejemplo, que el 14 de abril, el Gipuzko Buru Batzar convocaba a los nacionalistas para que los guipuzcoanos se sumasen a sus filas en defensa de la religión. De esta forma, en junio de 1931 se constituía una alianza de carlistas, nacionalistas e independientes que, en las elecciones a Cortes, obtuvo los escaños atribuidos a la mayoría, dando origen a la Minoría Vasco-Navarra, que excepcionalmente se identifica por el origen de sus diputados, en vez de hacerlo por su filiación política. La alianza funcionó en cuanto a mantener los derechos y privilegios de la Iglesia, pero quedó rota en Pamplona a la hora de votar el anteproyecto de Estatuto, circunstancia que explica el cambio de postura del PNV (la adopción de la preconizada por ANV en 1930-1931) y su alineamiento con la legalidad republicana en 1936. Resultados electorales del PNV en Navarra durante la II República.

En las elecciones a Cortes de junio de 1931 presentaron candidatura conjunta en Navarra los nacionalistas, los conservadores y los tradicionalistas, formando la coalición Católico-Fuerista. De la misma salió elegido por Navarra el nacionalista José Antonio Aguirre y Lekube. Esta coalición se llamó en el Congreso Minoría Vasco Navarra y se rompió al no llegar a un acuerdo nacionalistas con tradicionalistas en la cuestión del Estatuto. Las elecciones generales de 1933 y 1936 suponen un fracaso para los nacionalistas navarros, que no consiguen ningún Diputado. En esos dos comicios el navarro Manuel de Irujo fue elegido Diputado a Cortes por Guipúzcoa. En las municipales de 1933, los nacionalistas navarros sólo consiguen mayoría de votos en 9 municipios de escasa población.

El PNV conoce en este período una expansión sin precedentes. Por otro lado, para adaptarse a las nuevas circunstancias, y en previsión del establecimiento del régimen autonómico, el PNV llevó a cabo una modificación de sus Estatutos, que tenía la virtualidad de anticipar un posible modelo constitucional para Euskadi. La evolución del PNV se hace más evidente año y medio después de la proclamación de la República. En agosto de 1932, el fracaso de la "Sanjurjada" va a contribuir a la resolución de las vacilaciones de este partido. Para algunos historiadores, esta evolución se inicia poco antes, a partir del primer "Aberri Eguna" (Día de la Patria), notándose cierta distensión, al menos en lo que se refería a las relaciones entre el nacionalismo y la República. En el verano de 1934, se produce una importante aproximación entre nacionalistas y socialistas (tendencia Prieto).

Cuando Marraco, ministro de Hacienda, empujado por fuertes presiones, impone los impuestos municipales de protección al vino, todo el municipalismo vasco se revuelve contra él por estimar que había sido violado el Concierto Económico. La asamblea de alcaldes de Zumarraga, presidida por Indalecio Prieto, fue impulsada por el PNV. Sin embargo, cuando una semana después José Antonio Aguirre -alcalde de Getxo y diputado a Cortes y una de las figuras más características de este período- recibe proposiciones de ampliar la unidad a otros asuntos y crear unos comités con los partidos de izquierda, retrocedió ante esa eventualidad. Probablemente, se trataba de no destacarse demasiado en el conflicto izquierdas-Gobierno, que se avecinaba a ojos vista. Durante todo el año 35, el PNV se fue distanciando aún más de las derechas. Por su parte, Aguirre creía que "el Estatuto Vasco tendrá más dificultades cuanto más se acentúe el auge derechista y tendrá más facilidades a medida que decrezca, aumentando el de la izquierda". Sin embargo, él y los suyos se consideraban "solos entre dos bloques".

KSS