Señoríos. En 1378 Carlos II dio el señorío del pueblo a perpetuo a Roger Bernard de Foix, vizconde de Castelbón. Su hijo, Carlos III, concedió el castillo y rentas de San Martín en 1391 al alférez Carlos de Beaumont. En 1394 era dueño del lugar Diego de Baquedano. En 1456 la corona otorgó el señorío a Bernart de Ezpeleta; esto fue confirmado en 1475 pero excluyendo la jurisdicción entre las protestas de la población por ser contrafuero. En 1513 estaba S. Martín en empeño en poder del mariscal Pedro de Navarra. El pueblo se redimió pagando la deuda y volviendo así a la Corona.