Udalak

MENDAVIA

Sindicalismo mendaviés. El Sindicato Único de Trabajadores de Mendavia se constituye el 17 de julio de 1931 y desde ese momento se adhiere a la Confederación Nacional del Trabajo de España. Algunos de los 15 socios fundadores son: Apolinar Maiza, Felipe Elvira, Martín Gonzalo, Máximo Sádaba, Emilio Martínez, Sandalio Estella, Silvestre Maiza y Marcos Agustina. Los presidirá Leandro Elvira, en cuya casa habían establecido provisionalmente su domicilio social, con Julián Suberviola, jornalero, de secretario. El 17 de febrero de 1932 los afiliados al Sindicato Único y a la UGT proclaman el comunismo libertario en la villa, realizando disparos contra la fuerza pública. La CNT de Mendavia también participa en la insurrección anarquista de diciembre de 1933, como sus vecinos de Lodosa. El local del Sindicato fue clausurado a consecuencia de estos hechos hasta el 23 de abril de 1934. Quizás fueron los sucesos de octubre del mismo año los que provocaron un nuevo cierre gubernativo hasta el 12 de junio de 1935. El Sindicato Único y la Unión General de Trabajadores de Mendavia participaron en una Comisión Mixta Patronos-Obreros que se estableció en la villa para regir y regular el Registro de Obreros sin trabajo. Al Sindicato cenetista lo representa en la Comisión Francisco Albisua. En junio de 1934 la UCT proclama en toda España la huelga campesina, que tiene un fuerte impacto en Mendavia. Se dudaba si la CNT mendaviesa la apoyaría. El alcalde informa al gobernador que unas 300 personas irían a la huelga si la planteaba la UGT en solitario y unas 150 si lo hacía también la CNT. A la hora de la verdad sólo pararon los ugetistas. La difícil situación social y económica de la clase jornalera volvió a reunir a los dos sindicatos en la huelga de marzo de 1936, que tiene lugar en Mendavia para protestar contra el paro y el boicot a que se veían sometidos sus afiliados por parte de los patronos. Parece que el Sindicato Único no sobrepasó en Mendavia los 60 afiliados. [Ref. Virto Ibáñez, J. J.: La C. N. T. en Navarra «P. V.», 1985, n.° 176, p. 847].