Udalak

Mañeru

En estas calles y plazas se levantan casas de tres cuerpos o más, construidas en sillarejo dispuesto en hileras horizontales y con sillares en los enmarques de los vanos y en las esquinas. En el eje de la fachada, o algo desviada, se abren las puertas principales con potentes dinteles de piedra o arcos de medio punto con grandes dovelas. Sobre ellas suelen aparecer ostentosos escudos de piedra que se fechan desde el siglo XVI al XIX. Destaca en este aspecto la calle de la Luna por la abundancia de escudos y por su irregular trazado. Es interesante la fuente neoclásica del siglo XVIII rematada en un frontón curvo que fue durante muchos años lugar de encuentro de los vecinos.

Situado en la salida del pueblo queda un crucero del último tercio del siglo XVI de pedestal poligonal sobre el que se asienta una columna también poligonal con capitel compuesto. El conjunto está rematado con una cruz en cuyo anverso está la imagen del crucificado, en el reverso está la Virgen con el niño y un querubín. Las figuras son de estilo romanista.

La Parroquia de San Pedro Apóstol. Edificio neoclásico de finales del siglo XVIII que sustituye al primitivo de los siglos XVI y XVII, en el que había participado el maestro Juanes y su hijo Pedro de Urbieta en las obras de la cabecera, capillas y bóvedas. Parte del edificio del siglo XVI se ha aprovechado en la zona de los pies. Su original disposición se ha atribuido a Ventura Rodríguez, aunque en los libros parroquiales se confirma la participación del arquitecto navarro Santos Ángel de Ochandátegui.

Tiene planta de cruz latina con amplio crucero cubierto con una bóveda de media naranja con linterna. A los pies del templo se halla un coro alto encajado en la estructura interna de la torre que es la parte aprovechada del siglo XVI.

En el exterior la iglesia presenta muros de sillería y una pureza de volumen propia del Neoclásico, resaltándose los ábsides de los brazos del crucero y cabecera. La portada principal tiene puerta adintelada. Por encima de ella hay una hornacina donde se aloja la figura de San Pedro sedente revestido de pontifical del siglo XVI.

La torre se levanta a los pies y tiene dos cuerpos: el inferior es del siglo XVI, mientras que el cuerpo de campanas es barroco del siglo XVIII.

En el interior y en materia retablística hay que reseñar el retablo mayor. Fue proyectado por el célebre arquitecto Victor Eusa y realizado en 1930 por Arrieta, según modelos neoclásicos. El conjunto es majestuoso por el diseño y por el dorado. En el centro se aloja una hornacina y tallas de San Pedro, San Fermín y San Francisco Javier. Los retablos colaterales de la Virgen del Rosario y Santa Catalina son de estilo romanista, del siglo XVI, realizados por Bernabé Imberto.

Otras obras artísticas en la Iglesia son el conjunto de reliquias que fueron traídas de Santa María de Nájera en 1606, las tallas de la Virgen del Rosario, Santa Bárbara, San Andrés y otros santos, todas ellas con sus reliquias, cuya abundancia en la iglesia de Mañeru llama poderosamente la atención. Se encuentra también en la iglesia la talla de un Crucificado salido del taller de Imberto, así como las de Santa Bárbara y la Virgen del Rosario. En el coro de la parroquia existe un órgano de finales del siglo XIX, realizado por los hermanos Roqués de Zaragoza que presenta una tubería de gran calidad y que fue restaurado en 1982.

La ermita de Santa Bárbara se encuentra en el monte, a media hora de camino. De estilo rural restaurada hace unos años. En su interior alberga un retablo barroco de la segunda mitad del siglo XVII.

  • LOPEZ SELLÉS, T. "Contribución a un catálogo de ermitas de Navarra". C.E.E.N, 1972.
  • VV.AA. Catalogo Monumental de Navarra, II, 1983.
  • SAGASETA ARIZTEGUI, Aurelio; TABERNA TOMPES, Luís. Órganos de Navarra. Gobierno de Navarra, 1985.

ETE 2011