Zuzendariak

Figuerido, Manuel

En marzo de 1887 comienza a tomar cuerpo en el seno del Ayuntamiento la necesidad de una reforma tanto de la Banda como de la "Academia de Música": el 4 de marzo de aquel año dimitió Ramón Guerendiaín, presidente de la Comisión de Música, ante la situación de crisis reinante en ambas instituciones dependientes del Ayuntamiento irunés y por la disparidad de criterios entre los componentes de la citada Comisión a la hora de adoptar las medidas necesarias para atajar tal estado de cosas. Aceptada la renuncia de Guerendiaín, se le solicita que continúe de manera interina presidiendo una nueva Comisión especial que estudiará la reorganización de la Banda y de la "Academia de Música". Al poco tiempo, la Comisión especial da a conocer su parecer no unánime, pues emite dos dictámenes: uno firmado por una mayoría de cinco concejales y otro suscrito por el Concejal Echeandía, el cual opta por la "inmediata disolución de las actuales Banda y de la Academia de Música" creando nuevas instituciones; además cree que el actual organigrama de la Banda, con 40 miembros insatisfechos que no reciben ningún tipo de remuneración, que deben asistir a dos ensayos semanales y a uno o dos conciertos por semana, es inviable, por lo que en su opinión sería preferible un modelo de Banda formado por alumnos de la Academia que cultivara "músicas poco numerosas y de condiciones modestas". Finalmente se impone las tesis del primer dictamen perteneciente a la mayoría de concejales, los cuales deciden proponer al Ayuntamiento, "tras un meditado y detenido estudio de los reglamentos", la continuidad de la Banda y de la "Academia de Música" tal como están concebidas en ese momento, con la salvedad, por lo que respecta a la primera de ellas, de recordar al Director de la Banda los compromisos que tiene contraídos con el Consistorio de Irún pues, de no cumplirlos, "se le irrogarían perjuicios, exigiéndosele la debida responsabilidad".

Esta declaración supone claro indicio de que las relaciones de Figuerido con la Corporación irunesa no atravesaban su mejor momento. Pese al intento de reforma del Reglamento de la Banda de 1882 el primero de abril de 1887 con el fin de intentar llegar solucionar la situación de la Banda, lo cierto es que se creó un clima enrarecido (a ello contribuyó la falta de entendimiento de Figuerido con el director de la Academia Municipal de Música y Organista-Maestro de Capilla de Santa María del Juncal, Ramón Garmendia), que acabó estallando en agosto de 1887. Como consecuencia de esto se produjo la disolución tanto de la Academia Municipal de Música como de la Banda el 13 de agosto de 1887.

Uno de los motivos principales para decretar la citada disolución de la Banda fue la negativa de ésta a intervenir con motivo de la posible visita de la Reina de España. Anteriormente el Director o "Músico Mayor", Manuel Figuerido, había sondeado el ánimo de la Banda para participar en el recibimiento a la Reina pero a la reunión sólo habían acudido veinte integrantes: ante tal situación el Concejal Olazábal afirmó que "no existía la Banda y que el Músico Mayor no tenía fuerza moral o ascendiente bastante para tenerla a la altura debida" a causa de la indisciplina reinante, a lo cual rebatió Figuerido alegando que "siempre había cumplido con su obligación, no pudiendo imputársele a él lo que ocurría" y que presentaba su dimisión irrevocable. En vista de la situación en que se encontraba la Banda de Música, se decretó por unanimidad su disolución, la cual también se aplicó a la Academia de Música, "en consideración a los disgustos que habían acarreado en el pueblo" la actuación de ambas instituciones, debido a las malas relaciones entre los respectivos directores y a las que hemos aludido anteriormente. Pese a ello, se acordó asimismo autorizar un nuevo proyecto para crear una nueva Banda y una nueva Academia de Música municipales.