Partidos Políticos

Partido Comunista de Euskadi

Pese a estos esfuerzos y militancia, las primeras elecciones democráticas van a suponer un primer revés a un partido que no va a cesar de experimentarlos hasta su disolución. En Vizcaya obtiene 28.388 votos (5,3 %), en Navarra 6.420 (2,39 %), en Álava 4.141 (3,33 %) y en Guipúzcoa 11.604 (3,6 %). Este fracaso y las discusiones sobre el excesivo centralismo del partido merman aún más sus fuerzas. Ramón Ormazabal, Tomás Tueros e Ignacio Latierro encabezan la línea ortodoxa mientras Roberto Lertxundi, Esteban Eguren y Txemi Cantera lideran la más nacionalista vasca. De 1977 a 1982 Lertxundi, procedente de ETA VI, ocupó el cargo de secretario general desplazando a Ormazabal. Su corriente alcanzó la mayoría en el partido iniciando la convergencia hacia Euskadiko Ezkerra (IV Congreso del PCE-EPK) preconizada por Mario Onaindia en el seno de EE.

Entre 1981 y 1982 tienen lugar las negociaciones de fusión de parte importante del partido con EE mientras el resto prosigue manteniendo las primeras siglas y el liderazgo de Santiago Carrillo. Los votos disminuyeron aún más en 1984: Álava: 0,6 %, Vizcaya 1,2, Guipúzcoa 0,6, Navarra 0,4. Total: 0,9 %. En las elecciones de 1986 la fragmentación todavía va a ser mayor al concurrir, por una parte, Izquierda Unida (Pasoc, PCPE y FP) que obtiene el 1,27 % y por otra el PCE-Unidad Comunista que sólo recibe el 0,83 % de los votos de las cuatro provincias. Más tarde el partido, llamado Partido de los Trabajadores de Euskadi, fue languideciendo hasta la extenuación. Latierro, Dolores Arrieta y otros viejos militantes fieles a Carrillo ingresaron en el PSOE en 1991. De esta forma, después de un largo periplo, sus componentes han ido volviendo a sus orígenes: el nacionalismo de izquierda algunos, el socialismo de la II Internacional otros.