Monarquía y Nobleza

Juana I de Navarra y de Francia

El 16 de agosto de 1284 la reina Juana contrajo matrimonio con Felipe "el Hermoso", hijo de Felipe III. Un año más tarde falleció el monarca francés y Felipe "el Hermoso" heredó la corona de Francia, pasando a gobernar como Felipe IV. De esta forma Juana, además de ser reina de Navarra y condesa palatina de Champaña y de Brie, se convierte en reina de Francia.

Juana residió en París y en ningún momento viajó a Navarra para conocer el estado de su reino. Gobernó Navarra a través de una serie de gobernadores, tenientes, lugartenientes y merinos, la mayor parte de ellos franceses, y los asuntos administrativos llevados por estos funcionarios eran supervisados por el rey desde París. Felipe IV también se encargaba de resolver las peticiones o solicitudes que eran enviadas al monarca, resoluciones que se ejecutaban en el reino por medio de los gobernadores.