Corales

Coro Araba

El coro se formó en Vitoria-Gasteiz en la primavera de 1968 por iniciativa de un grupo de jóvenes vitorianos aglutinados por Manu Sagastume. Tras unos meses de trabajo vocal bajo la dirección de Anttón Lete, en octubre se incorporó al grupo Sabin Salaberri. En noviembre se decidió dar al grupo el nombre de Coro Araba. Desde sus inicios se centró en la interpretación de nuevas melodías, acordes al momento sociopolítico de la época y la profundización permanente en la música de raíz popular. Sin embargo, su repertorio se extiende no sólo a las interpretaciones de música coral vasca, sino, de manera importante, a la polifonía clásica y contemporánea, así como a la música sinfónico-coral y al canto gregoriano.

Al inicio, los ensayos tuvieron lugar en un local situado encima del desaparecido Café Suizo, en la calle Dato, y para el año 1969 ya habían realizado varios conciertos, entre ellos en el también ya inexistente Teatro Amaya, situado en la calle La Paz. Con todo, los primeros siete años fueron los más difíciles a causa de la represión franquista. Existía, por ejemplo, la censura previa de los textos de las canciones antes de cada actuación y algunos de sus miembros fueron amenazados por algunos de los miembros de los aparatos del estado. Gracias a Manuel María Lejarreta, presidente de la Diputación Foral hasta 1976, el coro se integró en el Consejo de Cultura, órgano de dicha institución, presidido por Carlos Pérez Echeverría. Como recordaba el ex diputado de Cultura y ex miembro del coro Peli Martín Latorre con motivo del 25 aniversario:

"...estábamos rompiendo moldes de prevención del sistema político por entones imperante, que constreñían las manifestaciones artísticas en lengua vasca, y la música coral que practicábamos en nuestra lengua resultó ser un bello aunque comprometido trabajo".

En esta década el Coro Araba Abesbatza participa en innumerables conciertos, forjando un estilo propio de interpretación coral. En nivel que alcanza la agrupación se consolida en los años 80, donde destacan los premios cosechados en los certámenes internacionales de masas corales de Arezzo y Tolosa (en el año 1984) bajo la dirección de Antton Lete y Manu Sagastume. Así, en la edición del diario Deia correspondiente al 24 de agosto de 1984, encontramos un titular que rezaba: "El Coro Araba, medalla de plata en el certamen internacional de Arezzo" y lo consiguió en la modalidad de canto gregoriano. Lo más llamativo del caso fue que el coro tuvo que ser integrado es esta categoría de canto al no poder hacerlo en la especialidad de polifonía al ser el único coro de voces graves que se seleccionó entre los muchos que optaban a ser admitidos en el certamen, por lo que la organización optó por prescindir del canto polifónico para voces graves. Tuvieron que preparar a contrarreloj las obras de gregoriano, por lo que el segundo premio fue más que meritorio. Unos meses más tarde, como reflejaba el artículo del diario Egin del 5 noviembre, en el XVI Certamen Internacional de Masas Corales de Tolosa lograban la medalla de bronce detrás de la Schola Gregorianista del coro Donosti Ereski y de la coral austriaca Kammerchor des Musikgymnasiums Wien.

Tras su triunfo en Arezzo el Araba recibió múltiples ofertas para cantar en Italia, Hungría y Suiza pero no pudieron atender muchas de estas invitaciones por carecer de medios económicos. Esto no fue óbice para que el coro triunfara en Lisboa durante el primer fin de semana de junio de 1985, siendo el invitado estelar de la Semana Músico-Coral de la capital portuguesa. En la memoria de los miembros de la agrupación se conserva vivamente la larga ovación obtenida tras interpretar Argia de Luis Aramburu arreglada para voz, coro y piano por Sabin Salaberri.

Desde entonces, la presencia del Coro Araba Abesbatza no ha sido habitual en los concursos corales. Una vez alcanzada la madurez coral, el grupo se dedica a la preparación de, además de los numerosos conciertos que da en la provincia de Araba/Álava, proyectos musicales puntuales. Por ejemplo, participa en varias ediciones de Europa Cantat, como en Estrasburgo, Pest o Vitoria-Gasteiz, colabora con las Orquesta Sinfónica de Euskadi (EOS) en la ópera Mirentxu de Jesús Guridi, realiza la Misa en si bemol mayor para voces graves y orquesta de Rheinberger con la Banda Municipal de Vitoria-Gasteiz etcétera. En 1986 la dirección fue asumida por Manu Sagastume. Con esto, se incrementó la incorporación de nuevas partituras; se introducen así autores del renacimiento, del romanticismo y de la música contemporánea.

En los años 90 encontramos al coro inmerso en varios proyectos discográficos. Anteriormente el coro ya había grabado en solitario un LP titulado Araba dirigido por Sabin Salaberri publicado en 1971. Aquel mismo año fueron solicitados para intervenir con algunos otros coros en el 2º volumen de Euskal Abesbatza Antolojia- Antología Coral Vasca que llevó a cabo la Casa Usandizaga. También cabe mencionar la inclusión del Argia de Luis Aramburu en el disco Así canta Álava (1985). Igualmente para celebrar el 50º aniversario de la Banda de Txistularis de la Diputación Foral de Álava se grabó la obra de Salaberri Euskaldun bioletea (1985) y en homenaje a Alfredo Donnay el coro participó en el disco Del solar Alavés (1986) con los temas "En vano", "Como esta noche" y "Padre Sol". Tras esas grabaciones parciales, en 1990 se acometió una empresa más ambiciosa, la de dejar testimonio sonoro de las obras a voces graves de Vicente Goikoetxea y Jesús Guridi, disco que fue publicado por el sello Elkar. Se pretendía contribuir con ello al conocimiento de la obra de los dos músicos alaveses quizás más universales. Una parte de las obras corales escritas por otro de nuestros músicos más queridos, Sabin Salaberri, fueron registradas en otro CD en 1997; Sabin Salaberriren Lana fue publicado por el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz y Diputación Foral de Álava y en él participaron el Coro Samaniego Abesbatza (dirigido por Aitor Sáez de Cortázar Junguitu) y el Coro Araba Abesbatza, entonces bajo la batuta de Roberto Ugarte.