Pintores

Blanco Ortega, Dionisio

En 1971 la obra está presente en la colectiva Arte Actual de Vizcaya en la Galería Antonio Machado de Madrid y en Arte Vasco (hasta febrero de 1972) en Barakaldo.

Entre 1971-72, participa con un numeroso grupo de pintores y escultores en un intento de divulgación del arte, llevando a cabo exposiciones y charlas por los pueblos, en barrios o Asociaciones de Familias. En 1972 participa en la exposición colectiva de Arte Español, celebrada en Italia por Comisiones Obreras y en Arte Vasco Actual en los Encuentros de Pamplona, donde se censura el cuadro El proceso de Burgos. "Los organizadores deciden retirar uno de mis cuadros, lo que provocó mi retirada de la exposición así como la de otros artistas". Ese mismo año dona la obra Artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1968) para el Museo de la Solidaridad. La exposición tiene lugar en el Museo de Arte Contemporáneo Quinta Normal de Santiago. Los artistas vascos demuestran su posicionamiento a favor de Chile, así, en septiembre de 1973 confeccionan un texto en solidaridad con Salvador Allende, que es suscrito entre otros, por Dionisio Blanco. A fin de agradecer la solidaridad y testimoniar el estado de abandono del legado un Comité cubano solicita la creación de exposiciones itinerantes por los distintos estados. Para este objetivo Dionisio Blanco cede la obra Represión.

En 1973 tiene lugar su cuarta exposición individual en la galería Mikeldi de Bilbao. El catálogo cuenta con un poema de Blas de Otero dedicado a un cuadro de Dionisio Blanco. De título Lo indeleble, hace referencia a una serie de cuerpos abatidos o a punto de serlo. Al confrontarse el texto y la imagen de un óleo cuyo motivo es un picado de la calle con una vista del edificio del Banco de Vizcaya, supone el relacionar el escrito y la obra, propiciando no pocas suspicacias en el Bilbao de la época, lo que conlleva que la citada institución bancaria no le adquiera ningún trabajo.

La galería Arteta de Bilbao, presenta una colectiva en Homenaje a Salvador Allende, Pablo Neruda, Juan Aranoa y Ciriaco Párraga en que participa Dionisio Blanco, a la vez que está presente en la II Muestra de Artes Plásticas de Baracaldo y se implica en un texto en apoyo de la solicitud de indulto para el crítico de arte José María Moreno Galván. En 1974 participa en la Mostra de Art Realitat de Barcelona. Auspiciada por el Partido Comunista, una selección de arte crítico, incómodo con el poder y contra las convenciones sociales. La editorial Cuadernos para el Diálogo (EDICUSA), en su colección Los Suplementos, publica el trabajo de Enrique Bustamante Ramírez, La Cultura Vasca, Hoy (Apuntes para un estudio). Entre los apartados del mismo se transcribe lo que denomina Conversaciones sobre Cultura Vasca, en las que participa Dionisio Blanco mientras colabora en la muestra Pro libertad de expresión en Barakaldo. Un año después toma parte en la campaña Libertad - Amnistía / Askatasuna - Amnistia Denontzat. Diseña un calendario de mano y una tarjeta que lleva un poema de Vidal de Nicolás y confecciona un cartel para Comisiones Obreras. Participa en la feria Arte-Expo 76 de Barcelona de la mano de la Galería Mikeldi de Bilbao y en 1977 muestra su quinta exposición individual en la misma galería. El Museo de Bellas Artes de Bilbao adquiere en febrero su obra Represión.

Blanco participa en el libro Agiriak, Euskal poetak eta artistak. G. Aresti-ren omenez, junto con 37 escritores y 32 artistas plásticos.

En la Galería Gaztelu de Zarautz tiene lugar su sexta exposición individual en 1978, al tiempo que participa en la exposición inaugural del Aula de Cultura de la CAM de Bilbao, Euskal Artea 78 y en Bizkaiko Pintura Gaur, una muestra itinerante organizada por el Aula de Cultura de la CAM de Bilbao, dirigida por el artista José Ramón S. Morquillas que se pasea por Gernika, Balmaseda, Gaminiz, Barakaldo, Durango y Getxo, entre 1979 y 1980. Este último año participa con una pintura en La trama del Arte Vasco dentro del apartado Denuncia social, exposición colectiva que tuvo lugar en el Museo de Bellas Artes de Bilbao. Se presenta la obra de unos ciento treinta creadores, con clara vocación de resumen del arte de todo el siglo, pero sin que se editara el catálogo que estaba preparado.