Músico natural de Aretxabaleta, nacido el 4 de mayo de 1884. Fallecido en 1960.
Desde joven se inició, entre los franciscanos, en el estudio del solfeo, el piano, el órgano y la armonía, y de sacerdote cursó la Composición y la Instrumentación con el maestro Guridi. Su vida artístico-musical está ligada a Arantzazu hasta el 1927. Este año pasó de organista a San Francisco el Grande de Madrid. En 1931, con el mismo cargo, al convento de Tolosa y, por fin, en 1934 fue nombrado Presidente de la residencia de Bilbao. En Arantzazu fundó la Banda Musical en el Colegio Seráfico, proporcionándole obras de propia inspiración. Fue autor de considerable producción de música instrumental y vocal. Es además autor de la letra vasca de las óperas Mirentxu y Amaia de Jesús Guridi, y de muchas adaptaciones euskéricas. Por tres melodías populares recogidas obtuvo el premio del semanario Argia en 1921. Fue asimismo premiado por sus artículos musicales sobre el autor de Iru damatxo por la revista Euskalerriaren Alde. En el Congreso de Estudios Vascos de Oñate (1918) leyó una interesante conferencia sobre "La música de iglesia en la historia del país vasco".
Tras la Guerra Civil hubo de exiliarse en Cuba donde ofició en la diócesis de Pinar del Río y después fue vicario en la parroquia de Guanabacoa y organista en la iglesia de San Antonio en la Habana.