Concepto

Arqueología

La Arqueología es una ciencia multidisciplinar, de creación relativamente reciente, que permite investigar los más variados aspectos de las sociedades humanas del pasado a partir de los vestigios materiales dejados por ellas, que perduren a lo largo del tiempo debido a los más variados procedimientos de fosilización (parcial o completa). La Arqueología se ocupa, en primer término, de la recuperación de restos materiales, muestras e informaciones conservadas en el registro arqueológico, documentándolos en todos sus extremos (trabajo de campo). La Arqueología articula también la posterior investigación de laboratorio, a partir de la cual se contextualizan los modos de vida de las sociedades humanas del pasado, remoto o reciente. Por último, a partir de los materiales e informaciones recuperados durante el trabajo de campo y laboratorio y contando con la superestructura ideológica y conceptual que aporta la Epistemología arqueológica, se procede a formular hipótesis e interpretar e inferir consideraciones acerca de los grupos humanos pasados analizados.

Aunque el dominio más frecuente para la aplicación de la Arqueología han sido los grupos humanos de la Prehistoria y la Antigüedad clásica, a lo largo del siglo XX se ha aplicado de modo creciente el método arqueológico para la investigación del periodo medieval y posteriores, las prácticas materiales de las primeras sociedades industriales, e incluso, considerando el empleo de la Arqueología como herramienta sociológica para comprender los hábitos de consumo de las sociedades contemporáneas. Como quiera que la información escrita sobre los grupos del pasado va incrementándose a medida que nos aproximamos a los tiempos actuales, la aportación de Arqueología se relativizará de modo paralelo con el paso del tiempo. De hecho, la Arqueología aporta prácticamente toda la información para el estudio de las sociedades ágrafas, como las que se desarrollaron a lo largo de toda la Prehistoria, en tanto que supone una mirada diferente (pero forzosamente complementaria) hacia el modo de vida de los grupos humanos más recientes.

Debido a su carácter interdisciplinar, la Arqueología se ubica en diferentes posiciones sobre el mapa de la Ciencia en los distintos países. En el conjunto del continente americano se relaciona la Arqueología de las sociedades ágrafas con la Antropología y el conjunto de las Ciencias Sociales, mientras que la denominación de "Arqueología" se reserva para la investigación de las Altas Culturas y los grupos históricos. En Europa, a excepción de las Islas Británicas que comparten parcialmente la visión americana, la Arqueología se sitúa en el ámbito de las Humanidades (en particular, la Arqueología histórica), e incluso, de las Ciencias de la Tierra y Experimentales (en el caso de la Arqueología prehistórica).

El origen de ambas vertientes de la Arqueología (histórica y prehistórica) se sitúa en Europa, si bien en dos contextos diferentes. Se suele relacionar el nacimiento de la Arqueología histórica científica con el descubrimiento y primeras excavaciones, durante el siglo XVIII, de la ciudad romana de Pompeya. Si bien existen interesantes precedentes desde el mundo clásico y renacentista, la investigación de las civilizaciones de la Antigüedad en el entorno circum mediterráneo a lo largo del siglo XIX configura definitivamente el protocolo de investigación arqueológica aplicada a estas sociedades, que se completará en la misma región, ya en el siglo XX, con el surgimiento de la Arqueología medieval y postmedieval. Este origen determina el vínculo preferente de la Arqueología clásica con la Historia y la Historia del Arte. Sin embargo, el nacimiento científico de la Arqueología prehistórica bascula hacia el norte de Europa, hacia aquellos territorios que quedaron fuera del limes del Imperio Romano, como Dinamarca, y que tienen mayor interés por el conocimiento de los grupos indígenas sobre los que se construye la identidad nacional y lingüística de los países emergentes tras las guerras napoleónicas. Alentado en la segunda mitad del siglo XIX por el debate evolucionista y sobre la antigüedad "antediluviana" del ser humano, la Arqueología prehistórica se aproximó rápidamente a las Ciencias Naturales (Biología y Geología), dando lugar en buena medida a la interdisciplinaridad actual del método arqueológico.