Concepto

Antropología Social

La imagen de un País Vasco anclado en la historia pasada, viviendo en él gentes que poseen una cultura con fuertes y señaladas similitudes con la cultura prehistórica es tan poco creíble como aquella otra imagen que, ignorando la historia o reconstruyéndola a medida, presenta al País Vasco en un espacio imaginado y fantasmagórico en el que sus gentes no han superado determinados estadios psicológicos. Tampoco son creíbles las imágenes estereotipadas que circulan de un lado al otro de la península.

El País Vasco no es ni una cosa ni otra. Es más bien fruto de distintas visiones y de pugnas de los más variados intereses entre determinados y concretos sectores de población, organizaciones económicas, eclesiásticas, políticas, académicas, literarias y sindicales, y entre distintos poderes gubernativos y administrativos locales y nacionales.

Por muchas y variadas razones, el pueblo vasco ha sufrido, acaso más que ninguno de la península, interpretaciones violentadas de su historia. (J. Caro Baroja, 1972, 2ª ed., 325). También es uno de los pueblos, se puede agregar, que más variadas y diferentes interpretaciones se han hecho sobre su cultura. Vascos entusiastas y algo ensimismados de una parte; antivascos ofendidos por la existencia de una lengua y costumbres que no son las suyas, de otra, han hecho de los vascos o una especie de ornitorrinco o de ser aislado en el concierto de los pueblos, o un animal de granja, producido en incubadoras y artefactos similares para este u otro fin. (Julio Caro Baroja, 1980, 2ª ed., 8).

Al igual que el resto de Europa, el País Vasco ha sido objeto de intensos fenómenos de uniformidad y de no menores esfuerzos por mantener una diversidad que sobrepasa la diferenciación política. Es un legado de siglos que se ha ido acentuando más a partir de la modernidad. Es a partir de la modernidad cuando en el País Vasco se desarrolla una acción consciente por mantener lo que aún queda, o por recuperar lo perdido.

Estas acciones, al igual que otras de distinto signo, son las causantes de que incluso su prehistoria aparezca desdibujada y rota por los intereses de unos y de otros. También aparecen desdibujados y rotos otros períodos más recientes. La realidad parece haber sido, no obstante, otra.