Urbanismo y construcciones civiles
Como la mayoría de los pueblos del corredor de la Sakana y de Arakil, Ihabar se ubica en el centro del valle y en una zona llana, aunque no presenta el plano regular y ordenado de otros lugares cercanos. La estructura de su casco urbano parece girar en torno a dos ejes que se cruzan, la llamada calle de San Esteban, y su prolongación la calle de San Juan, que lleva hacia el río, y la llamada Kale Nagusia, antigua carretera que discurre paralela al curso fluvial. En el cruce de estos dos ejes se encuentra la plaza, "Batasunaren Iturriko Plaza", con una fuente y seguida de la propia iglesia de San Esteban. En el núcleo se observan además amplias zonas despejadas.
En el caserío, tal vez algo menos cuidado que en otros lugares del entorno, se observan interesantes edificios, la mayoría de los siglos XVIII y XIX, con bloques cúbicos de gran desarrollo en planta y tres alturas. La casa parroquial puede constituir un ejemplo de lo dicho, con tres alturas, muros de mampostería que han perdido su enlucido y cadenas de sillar en esquinas y enmarques. Los vanos son rectangulares salvo la puerta, que se abre mediante un arco de medio punto con trece largas dovelas sin moldurar. En el quicio se observan algunas tallas vegetales, obra de algún hábil mazonero. Cerca, una casa muy reformada muestra hoy una fachada de piedra bien escuadrada, con arco también de medio punto y por encima un piso con dos ventanas rectangulares y con antepechos moldurados. Otra casa de la calle San Esteban muestra el mismo esquema, pero algo más desarrollado. Así, la fachada, de amplio desarrollo horizontal, muestra un primer nivel con puerta abierta por arco de medio punto y flanqueado por dos ventanas. El piso noble se abre mediante tres ventanas de tamaño reducido y con antepechos moldurados, y por encima se ve un ático con pequeños tragaluces, también cuadrangulares. Siguiendo el antiguo eje de comunicación hacia Pamplona-Iruña, algunas casas forman una pequeña pero bien estructurada callecita, con casas donde predominan las fachadas enlucidas, dos alturas más ático y vanos rectangulares salvo los de acceso, en los que predominan los arcos rebajados. Volviendo hacia la plaza nos encontramos con un bloque aislado de tres alturas, muros enlucidos y cadenas de sillar, con puerta bajo arco rebajado y el resto de vanos rectangulares. Sobre el balcón central, el dintel lleva inscripción con la fecha de 1877. Delante se encuentra la fuente, sobre muro de sillería rematado por pirámides y un "aska" adosada, en la que se ha labrado una flor de seis pétalos. Se observan dos inscripciones, una en castellano en la que se lee: FUENTE / DE LA UNIÓN / YABAR. Debajo se ve otra, en euskara esta vez y al parecer más antigua, hoy ilegible pero en la que puede adivinarse su nombre euskaldun "Batasunaren Iturria". También podemos destacar otra casa aislada, con tres alturas y tejado a cuatro aguas, cuyas fachadas alternan paños enlucidos con otros en mampostería y sillar. Los vanos son cuadrangulares salvo la puerta que, como tantas otras veces, consta de un arco de medio punto. Ostenta un escudo rococó de fines del XVIII. Por último, destacaremos un chalet moderno de estilo ecléctico y dotado de personalidad, con un pórtico de estilo "neovasco" y cuerpo principal de piedra y ladrillo que imita la arquitectura de entramados de madera.
Ermitas
La ermita de San Juan Bautista se encuentra a la salida del pueblo hacia la Sierra de Andía, cruzando la vía del tren, y es hoy capilla cementerial, adosada al propio camposanto. En cuanto a la ermita de Nª Sra. de Garrinlarrazu, Pérez Ollo especula con la posibilidad de que estuviera relacionada con dos despoblados del entorno, Gárriz e Ilarrazu, de donde vendría su nombre. Sea como fuere, hoy no queda rastro de esta antigua ermita.
Parroquia de San Esteban
Se trata de un templo de origen medieval, muy reformado en época barroca, concretamente en el siglo XVIII. Lleva planta de cruz latina, con una única nave dividida en tres tramos más el correspondiente al crucero. Lleva además transepto acusado en planta, y cabecera rematada en testero recto. Ostenta un coro alto a los pies del templo, y colmatando los ángulos resultantes en la cabecera se adosan dos estancias cuadradas, de las cuales la correspondiente al lado de la Epístola es hoy sacristía. En cuanto al acceso, se realiza por el lado de la Epístola, y se cobija por un pórtico que luego describiremos. Los muros van en sillar y mampostería al exterior, observándose numerosas huellas de ampliaciones y reformas. Al interior se articulan mediante pilastras cajeadas, con una cornisa que recorre toda la fábrica a la altura de los capiteles. Se perforan además por un total de ocho ventanas, que dan buena iluminación al interior. Se cubre la iglesia con una bóveda de medio cañón, que lleva lunetos en el lado de la Epístola de los dos primeros tramos, en el tramo previo al crucero y en la cabecera. Los arcos fajones apean en la cornisa que recorre todo el perímetro. En el crucero hay una cúpula sobre pechinas y articulada mediante fajas dispuestas en formas radial. Al exterior, la puerta consta de un arco de medio punto simple, y la cubre un vetusto pórtico de piedra con dos arcos de medio punto sobre pilar de sección cuadrada al que se adosa una pilastra lisa. La torre, sobre el primer tramo de la nave, es un prisma simple y de aspecto pesado, abierto por sendos huecos rebajados, practicados para alojar las campanas.
El retablo de San Esteban preside el templo. Se trata de una obra manierista de hacia 1570, con resabios platerescos en su mazonería. La traza consta de banco, dos cuerpos de tres calles y dos entrecalles cada uno y ático rematado con frontón triangular. Se articula mediante columnas de fuste estriado y hornacinas que albergan esculturas. La iconografía consta en el primer cuerpo de relieves de la Oración en el Huerto y la Flagelación, junto con algunas imágenes modernas. En el segundo cuerpo hay relieves con escenas del martirio de San Esteban y tallas de San Esteban, San Antonio Abad y un obispo. En el ático hay un calvario de bulto con el Padre Eterno en relieve presidiendo, así como sendas tallas de San Miguel Arcángel y San Sebastián. El sagrario es original.
En el lado del Evangelio se encuentra el retablo de la Inmaculada, con mazonería e imaginería modernas y sin mucho interés.
Simétricamente dispuesto respecto al anterior se levanta el retablo de Santa Bárbara, romanista de hacia el 1600. Consta de banco, primer piso con tres calles y coronamiento. La imagen titular, de canon esbelto, va flanqueada por sendos relieves con las figuras de la Magdalena y Santa Lucía. En el ático los relieves de San Pedro y San Juan Bautista rodean una imagen moderna de San Antonio de Padua.
En la sacristía se puede encontrar un lavabo barroco, así como diversas piezas de platería.
Joseba ASIRON SAEZ (2007)