Painters

Bilbao Delgado, Iñaki

Pintor vizcaíno, nacido en Bilbao en 1956. Hijo del fotógrafo Iñaki Bilbao Bilbao.

En 1978 obtiene el título de profesor de dibujo por la Escuela Superior de Bellas Artes de Bilbao y gana por concurso público el puesto de Profesor Interino en el Instituto de Barakaldo III. En 1981 consigue la plaza de Profesor Agregado de Bachillerato y la convalidación del título de Profesor de Dibujo por el de Licenciado en Bellas Artes. Recibe una beca de creación artística concedida por el Ministerio de Cultura en 1983. Tiempo después, en 1992, comienza a impartir clases en la rama de euskera de la Facultad de Bellas Artes de la UPV. Tras lograr el título de Doctor en Bellas Artes en 1994, dos años después obtiene la plaza de Profesor Titular del Departamento de Pintura de la Universidad del País Vasco.

En 1977 participa en una exposición colectiva en el Museo de Bellas Artes de Bilbao, fruto de su selección en el III Certamen Vasco Navarro de Pintura. Un año más tarde es premiado en la IV Bienal de Pintura Euskal Artea y en el certamen Bizkaiko Artea en 1985. Su primera muestra individual tiene ocasión en 1976 en Barakaldo. Le sucede dos años después una exposición en la Galería Recalde de Bilbao. Participa en la feria Arteder de Bilbao donde muestra stand individual en 1981 y 1983. En 1986 expone en el Aula de Cultura de Murcia y un año después en el Museo de La Rioja, Logroño. Le suceden, entre otras, las exposiciones realizadas en la Galería CLP de Portugalete (1988), en la Galería de la Caja Laboral de Vitoria (1989), en la Estación del Norte de Bilbao, patrocinada por Renfe (1990), en Udal Aretoa de Gernika (1991), en la Galería Velázquez de Valladolid y Arrigorriaga (1992), en la Galería La Brocha de Bilbao (1996), en el Alcázar de los Condestables de Medina de Pomar y en la Galería Ibercaja de Logroño (2000), en la Sala de Kutxa de San Sebastián (2001), en la Sala Municipal de Barakaldo (2002), o en Bikuña Jauregia en Legazpi (2003) donde muestra Pasaia.

Entre las muestras colectivas en las que participa podemos destacar la itinerante Bizkaiko Pintura Gaur (1979), Arte Bizkaia en la Sala Rekalde de Bilbao (1987), la itinerante Margen Izquierda (1998), o la realizada junto con Jorge Baldessari en el Instituto Cervantes de Utrech (2001). Al respecto de su obra, Paco Juan Costa escribe en el catálogo de la muestra Ezkerraldea Plastika :

"...evidentemente proviene de una vocación nítidamente pictórica, vinculada a los realismos más contemporáneos y, pensamos, de compromiso expresionista, con referencias a lo pop en su utilización de elementos populares en cuanto reconocibles...".

En el catálogo realizado para su muestra Pasaia , en Legazpi, el pintor habla así de su propia obra:

"La pintura, esa que nos hace reconocer y recordar, es un arte del pasado, como la tragedia griega o como las danzas de los aborígenes creo que esa es una explicación que debe darse al espectador para que no sienta la ansiedad de si lo entiende o no, de si está al día o no. Con estas pinturas que someto a vuestra consideración y que son figurativas, se pretende apelar a esa capacidad para provocar el recuerdo de lo ya visto y a esa pequeña emoción que nos da el reconocer lo que estamos viendo, sobre todo en un sitio como Pasaia, que está cambiando tan rápidamente. Como el arte. No se ha de pensar ante estos cuadros que se está contemplando algo relacionado con el arte del momento, no. Se trata de un medio del pasado, utilizado para que el espectador recuerde y reconozca algo que está cambiando y que pronto será pasado, al menos en la forma en que aparece en estas pinturas."

Ceferino de Olmo, responsable de la Sala de Cultura del Ayuntamiento de Barakaldo, con el que el pintor mantiene una estrecha relación desde sus comienzos, habla así de los cuadros exhibidos en 1996 en la Galería La Brocha:

"...carácter insólito: poesía, metáfora, sueño, coexistencia de realidades no habituales y, sobre todo, presencia: aunque el pintor haya querido llevar al mismo pie de igualdad la figura y el fondo en que ella se inscribe, a la postre, el personaje gana la batalla. Es él quien hace que el cuadro esté vivo, quien alumbra con la luz de su humanidad la presencia del espacio que ocupa."