El día 11 rompían los carlistas el fuego contra la villa. El día 13 rechazaban una columna bilbaina formada de guardias forales, guardias civiles, carabineros y las contraguerrillas. El 29 de diciembre cortaban el paso de Olabeaga, cruzándolo de cadenas y cables. Una columna bilbaina de 1.500 hombres intentó destruir la obra, sin conseguirlo. Para el 29 el bloqueo era total, ocupando los carlistas los pasos y las cumbres de Puente Nuevo, laderas de Santo Domingo y Artxanda, Zorroza, Basurto, Arnótegui y Ollargan. Dirigía el asedio el Marqués de Valdespina. En enero de 1874 se rendían Luchana y Portugalete. El 20 de febrero se intimidaba a Bilbao. Al día siguiente comenzó el bombardeo de la plaza por las baterías situadas en Quintana, Pichón y Casa Monte, Artagan, Santa Mónica y Ollargan. Los generales Primo de Rivera y Moriones intentaban socorrer a Bilbao desde Santoña. Aniquilado su avance, dimitió Moriones y le sustituyó el mariscal Serrano, Duque de la Torre. El 25 de marzo hubo una batalla cruelísima para ambos bandos. El 6 de abril el general Concha sustituía a Serrano. El 28 de abril de 1874 los liberales ganaban la batalla en Muñecas y el 2 de mayo entraban triunfantes en Bilbao.