Región del Ega. El sistema hidrográfico que recoge el río Ega procede, la parte más importante, de una serie de valles colgados de Urbasa, Enzia, Iturrieta, montes de Vitoria, Izkiz y Lokiz. El Ega propiamente dicho se origina en tierra alavesa. Uno de los brazos nace en la sierra de Cantabria, en las cercanías de Lagrán. Recorre Bajauri y Obecuri (Treviño), Bernedo y Angostina (A). Penetra en Navarra por las estribaciones septentrionales de Cantabria-Codés y sigue su curso hasta Santa Cruz de Campezo (A). En este punto se une al otro brazo del Ega procedente de Roitegui, Musitu, Cicujano, Leorza, Maestu y Antoñana. De los montes de Azazeta ha recibido al Berrón, por Corres y Bujanda al río Izkiz, y en Antoñana al Sabando. El Ega, definitivamente formado, antes de entrar en Navarra, recibe al Biarra que recoge las aguas del valle de Arana. Esta zona de valles del norte y este -Arraya, Arana, Lana, Berrueza, Amescoas, Allin, Abárzuza, etc.- se complementa con otra amplia comarca más abierta, cuyos límites podrían marcarse con un arco, desde Armañanzas y Torres, hasta Allo, Dicastillo y Oteiza. Casi en el centro de las dos zonas se halla Estella, capital indiscutible de la región del Ega. La producción es variada. Madera, ganado, cereales y diversos productos agrícolas en el norte. Vino, aceite, hortalizas escogidas, frutas y cereales en el sur. En Estella se conjugan hoy dío lo monumental e histórico con lo moderno y progresista. La cercanía de Urbasa la dota de un inmenso parque natural veraniego. La parte meridional, también cercana, le ofrece un dilatado horizonte a las tierras cálidas de la ribera.