Literatos

Calleja, Seve

Por qué escribo para niños y jóvenes (En primera persona)

Escribir para niños y jóvenes cuando uno ya ha dejado de serlo y mejor conoce el lenguaje, es negarse a esconder la propia infancia y enseñarla sin pudor. Las personas crecemos como las matriuskas, esas muñecas rusas que van superponiéndose una sobre otra y que crecen sin dejar de ser nunca, en su interior, también la más pequeña, o sea, el niño que un día fuimos. Seguramente escribo y leo porque creo que la literatura es un juego de magia que me permite jugar a creer lo que no es cierto, a cambiar lo que no me gusta, a imaginar sueños o a espantar pesadillas. Para jugar a "si yo fuera tú", que me parece el juego literario por excelencia. Y como la mayoría de los que me rodean son casi siempre niños y jóvenes, es decir, hijos o alumnos, entonces casi todos mis juegos literarios son infantiles. De sobra sé que jugar a la literatura infantil requiere aprender a usar sus reglas, su lenguaje, sus intereses. Y que eso se consigue unas veces en las aulas, o en la sala de estar de casa, o en sus libros favoritos... Otras, en cambio, pienso que no es tan fácil como creen muchos adultos. Pero yo lo intento en cada obra.