Censo de escribanos reales. En 1762 se hizo un estudio afin de determinar el número de escribanos reales que eran necesarios en cada localidad. Esta villa fue una de las que quedó sin escribano real. En las Juntas generales de Gernika, celebradas en el mes de julio de 1800, se determinaría que en esta villa no hubiese escribano real que no fuese numerado de la misma, ya que con éstos le era suficiente.