Ermita de San Miguel de Zumetxaga. Se fecha en las primeras décadas del s. XIII. Pertenece al románico, aunque ya con algunos atisbos del estilo gótico. Ha sido bastante restaurada; la última reconstrucción tuvo lugar modernamente. Su factura es de sillería irregular. En el lado S. se ven cinco canecillos, correspondientes a un antiguo tejado, y debajo una puerta con tres arquivoltas lisas, y con las impostas y jambas lisas. En el lado N. hay otra puerta, cegada. En el O. está la entrada principal, que es de medio punto, habiendo a su lado una pila de agua bendita, de apariencia ambigua, pero que es bastante moderna. Se llega a esta puerta por unas escaleras. En el lado E. se encuentra el ábside, con cuatro contrafuertes; tiene una ventana con dos arcos apuntados, apoyados en impostas, con decoración vegetal, sobre columnas, cuyos capiteles están decorados con motivos latino-bizantinos; los fustes correspondientes están decorados. Esta ventana, en el interior de la iglesia, tiene dos columnas, una de ellas con el fuste liso. En la planta del templo se ve un cuerpo cuadrangular, cubierto por bóveda de cañón, separado por un arco toral apuntado, que descansa en un lado sobre pilares y en la parte del presbiterio sobre columnas de fustes lisos y con capiteles decorados con motivos latino-bizantinos; y por una escalinata de la tribuna cubierta por una bóveda. Se conservan en la ermita dos imágenes del santo titular, una de ellas bastante moderna, y otra de la Virgen con su Hijo. Iglesia parroquial de San Pedro. Su primera construcción fue de estilo románico, pero por las muchas transformaciones sufridas, la primera de ellas en el año 1150 y la segunda en el año 1520, prevalece en su exterior el ojival del s. XV, aunque con atisbos de otros estilos. En la última guerra civil fue derruida y modernamente se ha reedificado, habiendo sido trasladados algunos elementos románicos al Museo Arqueológico y Etnográfico de Vizcaya. Se conserva, después de la última restauración, la portada, del tránsito del gótico al plateresco. Primeramente tiene un arco de medio punto abocinado, y después hay otros arcos, uno en la parte donde se encuentran dos pináculos platerescos, que guardan bellas esculturas, y el segundo con decoración vegetal. Sobre dos arcos escarzanos está el parteluz, donde se nota la falta de una imagen, que era una Piedad, del s. XVII; esta figura junto con un San Pedro, que se encontraba en uno de los lados de la portada, se conserva en el Museo Arqueológico y Etnográfico de Vizcaya. En el otro extremo de la portada había una imagen de San Pablo, hoy desaparecida. El templo es de tres naves. Debajo del coro, a la derecha, hay dos tumbas en nichos góticos, en cuya parte superior se ven las armas de los Villela; a la izquierda se ve otro nicho del mismo estilo que guarda un sepulcro en cuyo frente se ven pequeños escudos. En el altar mayor había un retablo renacentista del s. XVI policromado, cuyos laterales eran platerescos; hoy las figuras pertenecientes al retablo se encuentran en el presbiterio, y han sido remozadas por el escultor Larrea, y distribuidas en un orden que se cree sería el primitivo. Unicamente han desaparecido los bajorrelieves que había al pie del retablo. Se conserva también en el templo una notable Piedad. En la última construcción del templo se hizo una moderna capilla, donde hay una bella figura de Jesucristo. Torre construida en 1660 por Juan de Hormaechea. Iglesia de Santa María. Data su consagración del año 1091, y reconstruida en el año 1848, época a que pertenece la fachada anterior. En el altar mayor hay un retablo barroco, presidido por una figura de Santa María la Antigua, talla del s. XVI, restaurada modernamente. También se conserva una figura de la Dolorosa del s. XIX. Parroquia de Santa María de Larrauri. Levantada en el s. XVI. Parroquia de Santiago de Laucáriz. Edificada en el s. XVI. En el altar mayor hay un relieve de talla ruda, de Santiago Matamoros. En los altares laterales se encuentran dos notables figuras renacentistas de la Inmaculada y de San José. Ermita de San Bartolomé, en el monte Berreaga. Había una imagen de mármol del santo titular, desaparecida en la guerra de 1936-1939, de Laukariz, donde se guardaba. En la parroquia de Santiago de Laukáriz se conservan dos óleos con escenas de la vida de la Virgen, que pertenecían a esta ermita. Ermita de Billela. Se conserva en ella una imagen de Jesucristo, del s. XVI. Ermita de La Magdalena en el barrio de Llona. Posee una ventana prerrománica. De los ss. XIV- XV, Torre banderiza de los Billela. Se encuentra muy transformada desde mediados del s. XIX. Torre de Elorriaga. Transformada en casa de labranza. Palacio de Mungia. Hoy desaparecido. Poseía una puerta armera de paso al jardín. En la escalera tenía una imagen orante de un Caballero de la Orden de Calatrava, hoy en el Museo Arqueológico y Etnográfico de Vizcaya. Casa-Solar de Arkaute. Se conserva una imagen de la Virgen y el Niño, que está policromada. Casa-solar de Landetxo. Caserío de origen medieval; conserva ventanas góticas bajomedievales con ajimez.