Fundación y aforamiento. Torralba del Río fue fundada por Teobaldo II en 1263, y repoblada y aforada con el fuero de Estella. Estos privilegios fueron confirmados por Luis Hutin en 1307.
Tributos. En 1368 pagaba Torralba al rey 20 libras y 8 sueldos carlines blancos con título de fonsadera y compró al patrimonio real la mitad de esta contribución por 153 libras de dicha moneda, Carlos II rebajó a perpetuo, 52 sueldos de la fonsadera que le pagaba por olas tantas casas que fueron derribadas en sus arrabales en la guerra de aquel tiempo contra Castilla, para fortificar el pueblo. La villa se libertó del todo de la fonsadera y tributo del horno en 1451; consistía en 9 libras, 7 sueldos y 6 dineros, y el pueblo dio por ella 300 florines para comprar la pecha de Piedramillera, la cual recibió el rey en cambio y era 9 cahíces de trigo, tres cahíces, un robo y un cuartal de avena y 48 sueldos y 9 dineros.
Villa beaumontesa. Torralba se adhirió al partido del Príncipe de Viana, siendo recompensada por éste en 1456, agregándole los lugares de Otiñano y Eregortes. Asimismo les concedió el título de buena Villa con asiento en Cortes, diversas exenciones fiscales y la celebración de una feria anual de 7 días desde San Bartolomé. Fue ocupada por las tropas castellanas, por lo que doña Leonor les confirmó los privilegios citados en 1466.
Asiento en Cortes. En las Cortes de Navarra los diputados de Torralba se sentaban junto a los de Pamplona, Estella, Tudela, Sangüesa, Olite, Aoiz, Viana, Monreal, Tafalla, Aguilar, Cáseda, Uharte, Villava, Mendigorria, Lesaka, Corella, Zúñiga y Lakuntza y junto a los representantes de los brazos militar y eclesiástico. según refiere Idoate en Rincones... [t. II, págs. 51 y 52]. En algunas ocasiones las Cortes negaron su asiento a algunos abades y obispos, por su condición de extranjeros; tal fue el caso que ocurrió con el abad de Irache en el año 1546, en que no fue admitido, pese al deseo del rey Felipe II. En el año 1561 surgen disputas entre las ciudades y villas que tenían asiento en las Cortes de Navarra, sobre el orden de colocación, siéndole asignado a Torralba un puesto detrás de Mendigorria y delante de Cáseda en virtud de su privilegio del año 1466.
Anexión castellana. El 8 de septiembre de 1512 los delegados de Torralba van a Logroño y reconocen a Fernando el Católico como rey y le prometen fidelidad. Por su parte, Fernando, siguiendo la costumbre, confirmó los fueros de ésta y otras localidades navarras.
En el valle de Aguilar. Torralba perteneció al valle de Aguilar hasta 1845, en que éste dejó de ser unidad administrativa. No obstante, conservó siempre el carácter de buena villa adquirido en 1456.
Desamortización Madoz. En cumplimiento de la Ley de Desamortización del 1 de mayo de 1855 se vendieron en esta localidad, en 1862, un molino harinero con su presa una herrería y una tejería; en 1863, 10 fincas de 46 robadas, una pieza de 4 robadas, cuatro fincas rústicas, un corral para ganado y doce fincas; en 1865, dos hornos de cocer pan. [Ref. R. G. CH. "La D. C. en N."].
Tributos. En 1368 pagaba Torralba al rey 20 libras y 8 sueldos carlines blancos con título de fonsadera y compró al patrimonio real la mitad de esta contribución por 153 libras de dicha moneda, Carlos II rebajó a perpetuo, 52 sueldos de la fonsadera que le pagaba por olas tantas casas que fueron derribadas en sus arrabales en la guerra de aquel tiempo contra Castilla, para fortificar el pueblo. La villa se libertó del todo de la fonsadera y tributo del horno en 1451; consistía en 9 libras, 7 sueldos y 6 dineros, y el pueblo dio por ella 300 florines para comprar la pecha de Piedramillera, la cual recibió el rey en cambio y era 9 cahíces de trigo, tres cahíces, un robo y un cuartal de avena y 48 sueldos y 9 dineros.
Villa beaumontesa. Torralba se adhirió al partido del Príncipe de Viana, siendo recompensada por éste en 1456, agregándole los lugares de Otiñano y Eregortes. Asimismo les concedió el título de buena Villa con asiento en Cortes, diversas exenciones fiscales y la celebración de una feria anual de 7 días desde San Bartolomé. Fue ocupada por las tropas castellanas, por lo que doña Leonor les confirmó los privilegios citados en 1466.
Asiento en Cortes. En las Cortes de Navarra los diputados de Torralba se sentaban junto a los de Pamplona, Estella, Tudela, Sangüesa, Olite, Aoiz, Viana, Monreal, Tafalla, Aguilar, Cáseda, Uharte, Villava, Mendigorria, Lesaka, Corella, Zúñiga y Lakuntza y junto a los representantes de los brazos militar y eclesiástico. según refiere Idoate en Rincones... [t. II, págs. 51 y 52]. En algunas ocasiones las Cortes negaron su asiento a algunos abades y obispos, por su condición de extranjeros; tal fue el caso que ocurrió con el abad de Irache en el año 1546, en que no fue admitido, pese al deseo del rey Felipe II. En el año 1561 surgen disputas entre las ciudades y villas que tenían asiento en las Cortes de Navarra, sobre el orden de colocación, siéndole asignado a Torralba un puesto detrás de Mendigorria y delante de Cáseda en virtud de su privilegio del año 1466.
Anexión castellana. El 8 de septiembre de 1512 los delegados de Torralba van a Logroño y reconocen a Fernando el Católico como rey y le prometen fidelidad. Por su parte, Fernando, siguiendo la costumbre, confirmó los fueros de ésta y otras localidades navarras.
En el valle de Aguilar. Torralba perteneció al valle de Aguilar hasta 1845, en que éste dejó de ser unidad administrativa. No obstante, conservó siempre el carácter de buena villa adquirido en 1456.
Desamortización Madoz. En cumplimiento de la Ley de Desamortización del 1 de mayo de 1855 se vendieron en esta localidad, en 1862, un molino harinero con su presa una herrería y una tejería; en 1863, 10 fincas de 46 robadas, una pieza de 4 robadas, cuatro fincas rústicas, un corral para ganado y doce fincas; en 1865, dos hornos de cocer pan. [Ref. R. G. CH. "La D. C. en N."].