Villes

ORTZAIZE

Bertrand, vizconde de Laburdi, con ocasión de su matrimonio con Ataressa, de la familia vizcondal de Baigorry o de Zuberoa, donó la mitad de los diezmos de Ossés a la catedral de Bayona. En 1168, Fontaner, obispo de Bayona, llevó a cabo una visita a la Baja Navarra y a Zuberoa. Al llegar a Ossés quiso despejar los accesos de la iglesia de San Julián de esta parroquia; para ello compró varios terrenos vecinos en morlanes, moneda usual en el País Vasco. En aquella época, la llanura que bordea la iglesia estaba bañada por las aguas del Lacca y formaba un espacio pantanoso. En las columnas anilladas y verticalmente acanaladas del arco de triunfo y los ángulos del coro de la iglesia actual, construida en 1668, parecen reconocerse los vestigios de la antigua iglesia de San Julián que se remontaba al s. XI o XII. De Ossés, Fontaner se dirigió a Baigorry. Allí Sancho Ramírez, de la familia vizcondal de Mauléon, le concedió todo lo que él y sus predecesores hubieran podido poseer en materia de derechos eclesiásticos sobre las iglesias y valle de Ossés. En su visita a Mauléon, fue recibido por la vizcondesa navarra y el vizconde Auger Miramont, en su castillo. La vizcondesa, de la familia vizcondal de Baigorry, no sólo firmó la donación efectuada por Sancho Ramírez sino que aún le concedió a perpetuidad la segunda mitad de los diezmos de Ossés, con lo que la diócesis de Bayona se vio dueña de todos los derechos y rentas del valle, así como de la casa de Chachtrianea (la «casa del Obispo»). Los escudos de esta casa fueron deteriorados durante la Revolución pero persistió la inscripción «Esta es la casa del obispo... 1628». Los obispos de Bayona solían venir frecuentemente a Ossés desde la época de las adquisiciones hechas en esta parroquia. Dos de ellos, Dominique de Manx y Jean d'Olce murieron allí; el primero en 1303 y el segundo en 1681. Dominique de Manx firmó, antes de morir, un testamento que según Jules Balasque «testimonia la gran liberalidad de este prelado y ofrece, desde el punto de vista histórico, un gran interés: contiene la nomenclatura exacta de las numerosas instituciones religiosas y caritativas de las que estaba dotada la diócesis de Bayona a principios del s. XIV». En 1566, Juana de Albret, reina de Navarra, invitó al obispo de Bayona a que abandonara la cuarta parte de los diezmos y las primicias a los habitantes de la localidad hasta que se hubiera reconstruido completamente la iglesia de San Julián. Sin embargo, la puerta principal data de 1668, lo que hace suponer que la iglesia tardó un siglo en ser reconstruida. En 1726, la población de Ossés era de más de 1.200 comulgantes. El capítulo de Bayona nombraba al párroco. El titular era ayudado por tres vicarios, dos de los cuales se hallaban en los anexos de San Martín de Arrossa y de Bidarray. Había dos hermandades, la del Rosario del Monte Carmelo y la de San José. La parroquia estaba compuesta por las aldeas de Horza, Ahaize, Irriberry y Gahardu.

Ainhoa AROZAMENA AYALA