Villes

MUÉS

Pueblo de planta longitudinal, de Norte a Sur, con cierta alineación y con la iglesia en un punto céntrico. Dividido en dos barrios, los tres puentes a lo largo del río condicionan la planta urbana, sobre la que se distingue una ermita en una altura próxima. Seguimos a Caro Baroja en «La C. en N.» para la descripción de los elementos constructivos más interesantes: 1 ) Quedan restos de construcciones torreadas de aparejo medieval muy antiguo. 2) Casas más modernas con arcos de medio punto y buena rejería, con algunas labras heráldicas y simbólicas de carácter. 3) Unido a Mués está el Palacio de Cábrega, edificio de planta rectangular y tejado a dos aguas, con planta baja y hasta tres pisos. En la fachada, el piso superior lleva cuatro ventanas góticas amaineladas y la puerta de entrada, que no queda al centro, es también gótica. Cuatro ventanas en el piso primero y tres en el segundo, todas rasgadas en época posterior, la completan. Hay algunos cuerpos modernos adheridos. El monumento más importante del casco urbano es la Parroquia de Santa Eugenia que si bien data del siglo XIII, de esta época sólo conserva los muros perimetrales de la nave y los dos tramos de cubierta de los pies de medio cañón apuntado. Se realizan en el siglo XVI el coro alto y obras que afectan al pórtico y a los exteriores en el siglo XVIII, adquiriendo su definitiva configuración en estilo neoclásico en el siglo XIX cuando se añade el gran crucero y la cabecera rectangular, y se articula el alzado por medio de pilastras de fustes lisos y capiteles jónicos sobre los que se coloca una cornisa de doble molduración que imprime un carácter sobrio y clasicista. El proporcionado efecto de la arquitectura se ve algo desfigurado por la moderna pintura de muros y cubiertas. Portada a los pies perteneciente a un siglo XIII avanzado protegida por un pórtico del XVIII. La torre barroca, que culmina en cubierta bulbosa con linterna y decorada con pirámides, bolas y volutas, es un ejemplo reseñable. En el crucero se halla un retablo neorrománico que posee una talla de la Virgen del Rosario del segundo tercio del siglo XVI. En el presbiterio, un retablo neorrománico del siglo XX sustituye al anterior del siglo XVI, del que además de la talla anteriormente citada se conserva una sedente, de Santa Eugenia, en el nicho central con un bello tratamiento de plegados en el ropaje y buena policromía. En el colateral del crucero otro retablo neorrománico con una talla quizá de origen medieval, bastante tosca. En la sacristía, se conservan muchas piezas de orfebrería. Presenta interés un incensario de estilo bajorrenacentista de comienzos del siglo XVII con brasero decorado por cartelas dentelladas en aristas. Hay relicarios de buena calidad. En una dependencia se encuentra una talla de Crucificado de finales del siglo XVIII. La ermita de la Virgen de la Cuesta es una construcción barroca de fines del XVII o comienzos del XVIII. Planta de cruz latina y cabecera recta. El retablo mayor es barroco y posee una rica y profusa decoración vegetal. En los grandes aletones que encuadran el cuerpo se decora con volutas y retorcidos follajes. La imaginería, es de estilo popular barroco. La Ermita de Santa María Magdalena es de estilo románico tardío con elementos protogóticos. Posee planta de nave rectangular y ábside semicircular separado del resto de la iglesia por un doble arco triunfal apuntado que recae sobre medias columnas adosadas. Cubierta de medio cañón con potente fajón central que se repite en el primer tramo de la cabecera y aquí se completa con cuarto de esfera. En los pies se abre una hermosa portada románica de medio punto con siete arquivoltas. La Ermita de Santa Teodosia de tipo rural, posee la talla renacentista de la titular. La casa n.° 3 de la c/ Mayor presenta un blasón rococó de la segunda mitad del s. XVIII de alabastro, con cabeza de querubín en cartela inferior, encuadrada por leones portantes y yelmo por timbre entre ángeles desnudos. Según una leyenda corresponde a las Armas de Gastón. En el n.° 35 se localiza otro escudo, del s. XVII, en mal estado de conservación, con cartela de cueros retorcidos y bordura de ricos follajes con cabeza de león inferior y yelmo por timbre. (C. M. N. II).