Villes

GORDEXOLA

La batalla de Gordejuela. Tiene lugar esta batalla -que Arana Goiri calificará en Bizkaya por su independencia de "gloria patria"- en el marco de las guerras que sostuvo Pedro I el Cruel de Castilla en la primera parte del siglo XIV. Escarzaga resume así los hechos: "el Señorío de Vizcaya, por herencia y por voluntad de los vizcaínos, correspondía a D. Nuño de Lara, niño que sólo contaba dos años. D. Nuño era hijo de D. Juan Núñez de Lara, señor poderoso en Castilla, enemigo de D. Pedro y que, en la enfermedad que en 1350 puso al Rey a las puertas de la muerte, había sido candidato al trono. Temieron algunos caballeros vizcaínos que el cruel monarca se ensañase en el niño por el odio que a su padre había tenido, y tomándolo de Paredes de Nava donde se encontraba con D.ª Mencía, mujer de Martín de Abendaño, se encaminaron a Vizcaya con el fin de salvarlo en tierras de su Señorío. Al saberlo el rey, que se hallaba en Burgos, enfureciéndose en gran manera, salió personalmente a perseguirle; mas llegando hasta Santa Gadea, se cercioró de que los vizcaínos habían pasado el Ebro, rompiendo a su paso el puente de Larrá y puéstose a salvo internándose en su tierra. No pasó adelante en la persecución y volvióse contrariado a Burgos, mas de allí, y sin pérdida de tiempo, envió sobre Vizcaya dos cuerpos de ejército, cuya intención era apoderarse del Señorío. Mandaba el primero, que penetró por Orozco, cuya torre de Unzueta sitió durante dos meses, Ruiz Díaz de Rojas, señor de Poza en Castilla, y era capitaneado el segundo por Fernán Pérez de Ayala. Pérez de Ayala, atravesando, sin duda, la montaña de Berbíquez, entró en el valle de Salcedo, atacó a la torre de Aranguti y la tomó y puso guarnición en ella. Muy pronto los vizcaínos se congregaron para la defensa de la tierra; reuniéronse diez mil, acudieron a Aranguti, y aunque el de Ayala se defendió y resistió en la fortaleza, que había bien pertrechado, hubo de desistir de llevar adelante su empresa, devastando, en su retirada, el valle de Gordejuela, donde quemó y destruyó cuanto pudo hallar al paso. D. Nuño murió a la edad de ocho años en la villa de Bermeo, y recibió el Señorío su hermana mayor, D.ª Juana de Lara, que casó con el infante D. Tello, hermano bastardo del mismo rey D. Pedro I. Era D. Tello hijo de D.ª Leonor de Guzmán, una de las víctimas de la crueldad del monarca; había formado en la liga contra éste y tomado parte en la conjuración de Toro; y los dos hermanos se odiaban a muerte. D. Pedro prometió el Señorío de Vizcaya, que deseaba arrancar de las manos de su hermano bastardo al Infante D. Juan de Aragón, a quien, con este fin, había casado con D.ª Isabel de Lara, cuñada de D. Tello; y en virtud de las promesas del monarca y secundando sus odios, se encaminaban a Vizcaya el año de 1355 tropas enviadas por el Infante de Aragón y capitaneadas por D. Juan de la Cerda. Mas los encartados salieron a la defensa de su señor, según estaban obligados; esperaron al enemigo en los campos de Gordejuela y, trabándose batalla, desbarataron sus huestes que en desordenada huida hubieron de internarse en la vecina tierra de Burgos. Existe en el valle la tradición de haberse dado esta batalla en la cañada de Iratzagorría, en la torre de Largaña, mas ignoro qué fundamento tenga tal afirmación."