La arquitectura civil está representada por dos casas, muy transformadas, del siglo XVI. Una de ellas presenta ingreso con arco de medio punto, con grandes dovelas y armas de los Baquedano. También, dos casas del siglo XVIII, neoclásicas, una con armas de los García de Eulate y otra con las de los Iriarte. Interesante crucero tardogótico del siglo XVI, compuesto de pedestal sobre el que se eleva un cuerpo prismático con contrafuertes angulares y óculo abierto con tracería flamígera en uno de los frentes. Antigua colonia escolar "San Miguel Excelsis", obra de Víctor Eusa (1934). La iglesia parroquial de San Andrés es una construcción protogótica de hacia 1200, de influencia cisterciense, muy remodelada en el siglo XVII en estilo barroco. Presenta planta de nave única con tres tramos y crucero con brazos y cabecera recta. De la traza medieval conserva parte de los muros perimetrales y el arco toral y fajones de medio punto con que se articulan los tramos, aunque probablemente también están remodelados.
De las reformas barrocas destaca el trabajo efectuado entre 1613 y 1634 por los canteros Pedro de Cuesta y el guipuzcoano Martín de Larrañaga. En 1678 traza las nuevas bóvedas el estellés Diego Lapuente. De este mismo cantero es, al igual que la torre, el pórtico que protege la entrada principal, que junto a una ventana de arco apuntado pertenece a la fábrica del siglo XIII. Dicha ventana presenta baquetón que apea en columnas cilíndricas de capitel figurado con figuras humanas y hojarasca y parejas de arpías, respectivamente, bajo cimacio decorado con bolas. La portada consta de arco apuntado abocinado por tres arquivoltas de ángulos en chaflán sobre imposta y pedestales lisos. El retablo mayor es barroco, de mediados del siglo XVIII; la talla del santo titular es romanista, de la centuria anterior. Tiene este templo buen ajuar de orfebrería, destacando una cruz plateresca del siglo XVI. La ermita de San Antón es de orígenes medievales, aunque muy transformada. Presenta planta rectangular de una nave de cuatro tramos sin crucero, cabecera recta y coro alto a los pies. Cubre con bóveda de medio cañón con arcos fajones de medio punto que apean en moldura y ménsulas lisas. Posee un pequeño retablo renacentista del siglo XVI.