En lo alto se sitúa la Parroquia de San Andrés que data de la Edad Media, aunque fue totalmente transformada en el renacimiento y posteriormente, a comienzos del XVII, en las bóvedas de la nave. Planta de una nave de tres tramos iguales y cabecera con tramo rectangular antecediendo al presbiterio de forma trapezoidal. Este tramo tiene una cubierta de bóveda de terceletes, la nave se cubre con bóveda de medio cañón con lunetos articulados por potentes arcos fajones. Detrás de la cabecera se adosan la antigua y la nueva sacristía. Todo el perímetro superior del edificio lo bordea una cornisa de bolas estilo Reyes Católicos. La torre de comienzos del XVII es de sobriedad herreriana. A los pies del templo se conserva parte de una sillería barroca con tableros de labores geométricas. Del lado del Evangelio se coloca un retablo barroco de vistosa traza que posee una talla del Cristo de la Agonía renacentista que destaca por el tratamiento expresivo de la anatomía en contraste con su rostro sereno. Al lado se coloca otro retablo neoclásico y a continuación un púlpito de hierro. En la capilla abierta a la cabecera del lado del Evangelio está un retablo de ordenada traza y estilo renacentista realizado por Pedro Imberto y Fermín Arbizu. La iconografía del retablo trata de la vida de la Virgen. Los relieves de la Anunciación y de la Visitación son de lo mejor del romanismo navarro. Conserva la policromía del momento. El retablo mayor de estilo rococó consta de banco con mensulones de rocalla en los extremos, cuerpo único y cascarón de remate lleno de decoración rococó. Relieves, tallas y fina policromía de motivos florales decoran el conjunto. La calidad de la escultura es muy aceptable. En la hornacina colateral del presbiterio un retablo del primer barroco con profusa decoración. Posee pinturas sobre lienzo. La sillería del coro, es de la segunda mitad del siglo XVII, y su autor, Gil de Iriarte. En la sacristía se halla la Virgen de Leorín. Es una escultura con caracteres estilísticos románicos que se puede considerar contemporánea de su ermita aunque ha sufrido algunos retoques. Una expresiva talla de un Crucificado de bronce del siglo XVI y una arqueta eucarística de madera con incrustaciones de nácar. Entre las piezas de orfebrería hay que destacar el cáliz de plata realizado por Alonso de Samaniego en torno a 1604; y dos relicarios, uno del siglo XVII y otro del XVIII con labor de filigrana. La ermita de la Virgen de Leorín es una obra de comienzos del siglo XIII de estilo de transición entre el románico y el gótico. Tiene planta de nave única con cabecera ovoide que lleva cubierta de horno. La nave se cubre de forma adintelada con vigas. Exteriores de mampostería. La portada consta de dos arquivoltas apuntadas sobre pilares. La Ermita de San Gregorio Ostiense del siglo XVI ha sido reconstruida en 1960. Posee nave rectangular y cabecera recta. La cubierta es a dos vertientes sobre vigas de madera. Preside la ermita un retablo de hacia 1660 con tallas de diferentes siglos pero todas ellas de factura algo tosca. En cuanto a la arquitectura civil, Caro Baroja señala la existencia de curiosos vestigios de la época señorial. [Ref. Caro Baroja "La C. en N", III, CAN, 1982]. La casa n.° 9 de la c/ Oficiales, del siglo VI, consta de dos cuerpos y ático de sillarejo interrumpidos por un panel central de sillería que alcanza el piso inferior y el noble, con escudo deteriorado en la clave del portalón de entrada de medio punto. Tiene otro escudo, del siglo XVII, en el segundo cuerpo, sobre cartela de cueros retorcidos, yelmo por timbre y abundante decoración de follaje. En esta misma calle hay una hermosa casa señorial de dos cuerpos y pequeño ático, formando un gran bloque horizontal de sillarejo y sillar en los vanos y esquinas, que data del siglo XVII. En los dos frontis hay un escudo; uno es barroco del siglo XVII con querubín inferior, entre niños y yelmo por timbre y decoración vegetal. El otro es de la primera mitad del XVII con cartela de cueros bajorrenacentista y yelmo por timbre. El portal de Urra, en la c/ Misericordia, consiste en un amplio medio de punto de gran dovelaje con escudo barroco del siglo XVIII en la parte alta. Detrás de este portal, una edificación del siglo XVI con gran puerta adintelada con escudo en la clave. En la c/ de los Fueros se ubica una gran casa con dos cuerpos de sillería y ático de mampostería del siglo XVI, gran arco de medio punto y puerta adintelada. Tiene dos escudos, uno del siglo XVII entre leones y yelmo por timbre, y el otro, barroco del siglo XVIII, con busto femenino inferior, entre niños muy deteriorados y yelmo por timbre. En la c/ San Antón destaca un escudo de la segunda mitad del siglo XVIII, con querubín inferior y yelmo por timbre. En la c/ Mayor se sitúa un gran arco de medio punto de la segunda mitad del siglo XVI con el intradós moldurado y escudo en la clave sobre cartela de cueros retorcidos representando un águila. En el n.° 9, una casa de 1859 con escudo de la época entre leones portantes y yelmo por timbre. Cerca de la plaza del Invencible se alza un edificio de la segunda mitad del siglo XVI formando un bloque de sillería de dos cuerpos y ático, con gran puerta de medio punto en posición descentrada con escudo sobre cartela de cueros retorcidos en la clave. En el segundo cuerpo, otro escudo barroco de finales del siglo XVII, entre leones y yelmo por timbre. Cerca, otra casa del siglo XVI que conserva un gran arco apuntado de eje desviado y escudo en la fachada sobre cartela bajorrenacentista, timbrado por cabeza barbada. Otro escudo de 1772 (C. M. N., M. de Estella).